El alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, convocará a los portavoces de los distintos grupos políticos de la corporación la próxima semana para analizar las posibles soluciones a la renuncia de la consultora Eptisa, empresa encargada de revisar el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM). Los informes técnicos y jurídicos sobre las posibles alternativas al problema, que no solo afecta a Vilagarcía, sino también a otros doce municipios gallegos, ya están finalizados, motivo por el cual se ha convocado este encuentro.

Desde Ravella se reconoce que la renuncia de Eptisa ha causado un importante perjuicio, el gobierno local confía en que con la solución propuesta por los técnicos será posible mantener el calendario previsto en su día. Esa propuesta pasa por lograr la aprobación inicial del documento dentro del actual mandato, hoja de ruta que se marcó en su momento y que el grupo de gobierno está dispuesto a cumplir. En caso de conseguirse, se abriría el plazo de alegaciones, previo a su aprobación provisional por el pleno de la corporación, mientras que la definitiva corresponderá a la Xunta.

A lo largo del último año, los cambios en Eptisa y, a su vez, la modificación de criterio de la nueva dirección (primero se comprometió a finalizar con los trabajos para, después, renunciar definitivamente) supusieron un notable retraso en los planes iniciales de la tramitación de revisión del Plan Xeral. Tras la crisis de la empresa en diciembre de 2016, cuando varios técnicos fueron sometidos a un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), y después de que el alcalde negociara con la nueva dirección la continuidad de los trabajos, en la primavera de 2017, el documento fue enviado a la Xunta.

En el verano, el Servizo de Avaliación Ambiental de Plans e Programas realizó un requerimiento al Concello para que complementase la información técnica enviada, un trámite normal en la revisión y redacción de los planes urbanísticos. En ese escrito se alertaba de la necesidad de enviar planos a otra escala, identificar los montes en mano común o los trazados de las redes de servicios propuestas en la ordenación de núcleos rurales. La renuncia de Eptisa impidió que se pudiese resolver ese requerimiento, ya que, desde el mes de junio, Vilagarcía se encuentra sin equipo redactor del PXOM. A la vista de los informes elaborados por los técnicos municipales, podría haber una solución que permita no solo resolver esas peticiones de la Xunta en un breve plazo de tiempo, sino continuar con los trabajos hasta la aprobación inicial de la revisión en el pleno.