En el verano de 2015 Cortegada sufrió un incendio que puso en jaque al pueblo de Carril, que veía amenazada su joya natural más preciada. Los vecinos, con cubos y capachos, no dudaron en participar en la extinción del fuego y pusieron a disposición sus embarcaciones para los traslados a la isla. Afortunadamente el suceso se quedó en un conato de incendio sin consecuencias graves, pero evidenció la falta de medios para combatir las llamas en esta isla perteneciente al Parque Nacional Illas Atlánticas.
Dos años y medio después, "los medios contra el fuego de los que se dispone en la isla son exactamente los mismos que había antes del incendio de julio de 2015", denuncia el gobierno de Vilagarcía, que a través de una moción que lleva al último pleno del año (a celebrar el próximo jueves 28 de diciembre) reclama a la Xunta que dote a Cortegada del material necesario para actuar en un nuevo caso de incendio.
La portavoz del grupo socialista, Tania García, esgrime que las brigadas forestales de la Xunta más próximas a Vilagarcía se encuentran en Cuntis y Meis, "a una considerable distancia para una respuesta rápida en caso de fuego, a lo que hay que añadir la dificultad del acceso a la isla si se produce un incendio".
A raíz del suceso del verano de 2015, García recuerda que la Xunta realizó una serie de anuncios sobre medidas antiincendois en Cortegada que se quedaron "en una mera declaración de intenciones".
Sin embargo el Concello sí ha tomado cartas en el asunto, pues el Servizo Municipal de Emerxencias e Protección Civil creó un sistema de bombas flotantes para poder acudir a sofocar un fuego en el monte de Cortegada, captando directamente agua del mar, sin necesidad de tener que recurrir al traslado de otro tipo de dotaciones. Las bombas flotantes fueron testadas para comprobar su efectividad y están a disposición del servicio ante una llamada de emergencia.
La moción socialista consta de dos partes. Además de los medios de extinción de incendios, el gobierno vilagarciano solicita el apoyo de la oposición para instar al ejecutivo de Feijóo a que financie la construcción de un centro de interpretación de Cortegada, que "supondría además de un punto de difusión e información sobre la isla, un recurso turístico más para nuestra villa", justifica el equipo de Varela.
El propio alcalde ya comunicó al conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, la intención del gobierno local de construir este centro de puesta en valor de la isla, aunque considera que debe ser la administración gallega la que lo pague, ya que el parque nacional es de competencia autonómica.
Hasta hace año y medio Vilagarcía contaba con un Centro de Interpretación de la Ría de Arousa (CIRA) en el edificio diseñado por César Portela conocido popularmente como "el acuario" de la playa Compostela. El actual gobierno de Varela decidió demoler el inmueble por constituir una barrera en plena fachada marítima del municipio -estaba ubicado en la propia arena-. Además estaba infrautilizado y muy vacío de contenido. Actualmente el material que albergaba el CIRA está guardado en instalaciones municipales a la espera de un nuevo centro de interpretación.
Plan de Ajuste y nuevo PP
Además de la moción del PSOE sobre Cortegada, el pleno del próximo jueves día 28 incluye otros asuntos, como la toma de conocimiento de la cancelación del Plan de Ajuste, que supondrá un importante alivio para la economía de Ravella, o la nueva composición del grupo del PP tras la marcha de Fole. Elena Suárez, además de ejercer de portavoz municipal, será la representante popular en el Consello de Normalización Lingüística, en el Consello Consultivo Económico e Social, en la Mesa Local de Comercio y en la Mancomunidade do Salnés. Por su parte, Manuel Méndez, que sustituye el sillón de Fole, estará de titular en dos de las cuatro comisiones informativas, concretamente en las de Economía y Urbanismo.
La formación conservadora lleva a pleno una moción sobre mejoras en los cementerios municipales y recupera la de nombrar Hijo Adoptivo a título póstumo al fundador del Grupo Junquera, Santiago Iglesias. El BNG centra sus propuestas en contra de la subida de los peajes de la AP-9.
