Un monumental magnolio grandiflora ocupa el jardín central del pazo de Rubiáns para impresión de los visitantes, incluso del ilustre Stephen Hawkings que hace dos años se refirió a este ejemplar como "catedral botánica de Galicia" por sus espectaculares dimensiones que ni siquiera alcanzaban los que había plantados en su casa natal. Este árbol llegó a la casa de los marqueses de Rubianes en 1710 y según reza su placa es uno de los primeros ejemplares de la especie que existen en Galicia. Obviamente por su envergadura, antigüedad y características está incluído entre los árboles senlleiros y dignos de protección del catálogo.