La vista que iba a celebrarse la semana próxima en los juzgados de Vilagarcía a raíz de la demanda que presentó Laureano Oubiña contra Carmen Avendaño se ha suspendido. La citación era para el martes, 5 de diciembre, pero la juez encargada del caso está de baja médica, por lo que se ha aplazado la declaración de los implicados. La vista será ahora o bien a mediados de este mes de diciembre o a mediados del próximo de enero.

El polémico Laureano Oubiña demandó a la presidenta de la fundación antidroga Érguete, pues según él dañó su imagen y su honor al afirmar que había traficado con drogas distintas del hachís. Por ello, pide que Avendaño sea condenado y le pague una indemnización de 150.000 euros.

La demanda se produjo a raíz de una entrevista que le hicieron a Laureano Oubiña en una televisión. En el transcurso de la misma, se incluyó una conexión telefónica con Avendaño, y ésta se dirigió a Oubiña para espetarle que no solo había ganado dinero con el hachís. El capo arousano considera que al realizar esa afirmación, Avendaño se refería a otras sustancias, como la cocaína y la heroína, y que por lo tanto le calumnió, pues recuerda que la única droga ilegal por la que fue condenado es el hachís. La presidenta de Érguete, no obstante, se muestra tranquila.

"No he dicho nada que no fuese cierto -afirmó ayer-, pues no hay que olvidar que Oubiña también traficó con tabaco rubio americano, que también es una droga".

Considera que al denunciarla, lo que busca Laureano Oubiña es publicidad. "Pero no se da cuenta de que esa publicidad le va a perjudicar", prosigue Avendaño.

El capo arousano disfruta actualmente de la libertad condicional, a la espera de que se licencie de su última condena, que ha sido por blanqueo de dinero. Ese licenciamiento estaba inicialmente previsto para septiembre de 2019. Oubiña Piñeiro salió de la cárcel en febrero pasado, después de que le concediesen el tercer grado penitenciario y fuese admitido para trabajar en una organización no gubernamental de Madrid.

Carmen Avendaño ha sido de alguna manera la antagonista de Oubiña desde la época en la que éste dejó el contrabando de tabaco y se embarcó en el tráfico de estupefacientes. Ya compareció como testigo en una demanda que Oubiña interpuso contra una revista de Madrid, y también fue demandada por la mujer de Oubiña, la fallecida Esther Lago, por el supuesto robo de un pendiente de diamantes, ocurrido en un altercado en el que Avendaño ni siquiera estaba.

No obstante, la imagen icónica del enfrentamiento entre ambos está vinculada al pazo de Baión, a cuyas puertas estuvo dos veces Avendaño. Una durante la operación Nécora. Otra, en 2008, cuando se escenificó el traspaso a la sociedad de la finca embargada al capo. Ese día, fue ella quien abrió el portalón.