El presidente de la asociación de vecinos de Vilaxoán, Xoán Mariño, considera que es hora de que las administraciones se pongan a buscar una solución para la carretera de orillamar, donde el pasado fin de semana murió un hombre de Vilanova en un accidente de tráfico. Incluso les anima a retomar el proyecto de paseo marítimo, que se puso sobre la mesa en su día pero que actualmente parece condenado al fracaso, puesto que Costas del Estado no está por la labor de permitir ni más rellenos ni paseos "volados" sobre el litoral. En cualquier caso, pide a los políticos que no se obcequen tampoco con el paseo, y que se acometan actuaciones desde ya. "Siempre estamos esperando a lo que sucederá a medio o largo plazo, pero con esa excusa las cosas se van dejando, y hay que abordarlas desde ya".

En este vial falleció el fin de semana un hombre de 30 años, que viajaba en la parte trasera de un coche que se salió de la calzada en una curva y que tras subirse a una acera, chocó contra un árbol ornamental y una farola. En 2009, ocurrió otro accidente mortal en circunstancias similares, pues un coche subió a la acera y arrolló a un joven de 25 años que estaba corriendo.

La carretera de Vilaxoán por orillamar es más peligrosa de lo que las cifras de siniestralidad podrían sugerir. En un extenso tramo, desde el muelle de Ferrazo hasta el barrio de O Castelete, ya cerca del Intecmar, el vial va pegado al mar, con la única protección de un quitamiedos abollado. Carece de arcenes, y algunas de sus curvas pueden ser una trampa mortal para quien no conozca la carretera o entre en ellas demasiado rápido.

También tiene deficiencias para los peatones, pues existen barreras arquitectónicas para las personas mayores o discapacitadas, y hay zonas donde las aceras tienen menos de un metro de ancho o presentan una pendiente porque las entradas de las casas están por encima del nivel de la carretera. Asimismo, solo hay una banda de goma reductora de velocidad, y ni siquiera está completa.

Una fachada deteriorada

La fachada litoral de Vilaxoán tiene unas vistas privilegiadas a la ría, pero actualmente presenta un estado de gran deterioro urbanístico. En las proximidades del puerto y de la depuradora de aguas residuales, suele haber un olor bastante desagradable. Y en algunos de los inmuebles de la zona se aprecia el paso del tiempo.

Xoán Mariño afirma que "hay una deuda histórica con Vilaxoán", y que "la humanización" de ese tramo de la vía ayudaría a resolver los problemas de tráfico.

Asimismo, el presidente de la asociación de vecinos plantea otras mejoras concretas como la construcción de una rotonda en la intersección entre la carretera de Canelas (Víctor Pita) y el parque de Dona Concha. Aboga también por limitar la velocidad en ese tramo, y por la recuperación de una pequeña playa que el Ayuntamiento pretende habilitar como "canina", y que podría potenciarse mucho más retirando los rellenos que se hicieron hace años a ambos lados del arenal.

"Esta fachada es un privilegio, y no podemos esperar otros 20 años a que se haga alguna actuación en ella. El Ayuntamiento tiene que ver todas las posibilidades y opciones que hay, pero nosotros tenemos claro que hay que reordenar esa zona. En Vilaxoán la gente tiene muy claro que eso hay que arreglarlo", remacha Mariño.

El alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, manifestó tras el accidente mortal del fin de semana que se le ha pedido un informe a la Policía Local, y que una vez éste esté terminado se estudiarán las posibles alternativas para mejorar la seguridad en Víctor Pita.