La falta de precipitaciones se está convirtiendo en un severo problema para la comarca de O Salnés, sobre todo para la mayor parte de captaciones de agua en las que ya se lleva tiempo aplicando restricciones ante las escasas lluvias que se han registrado. Los dos últimos meses, octubre y noviembre, se han caracterizado por la práctica ausencia de lluvias, aunque no han sido los más secos de los últimos años.

Es más desde Meteogalicia apuntan a que en años anteriores, como 1981, 2001, 2004, o incluso, 2015, no fueron precisamente frecuentes las precipitaciones, aunque en ninguno de ellos tuvo un verano tan seco como el que se acaba de pasar.

El problema de la falta de precipitaciones no solo se ha extendido a comunidades de aguas, sino que también es apreciable en los cauces fluviales que atraviesan la comarca de O Salnés, como es el caso del Umia, cuyo caudal es de los más bajos desde que existe constancia. También se ha extendido a los pozos particulares de muchos vecinos, que se han secado por completo y se han visto obligados a recurrir a las traídas municipales o a la solidaridad de los más próximos para garantizar el suministro de H2O.

Donde todavía no se han tomado medidas restrictivas es en el servicio de la Mancomunidade, aunque la presa de Pontearnelas, de la que toma agua la comarca es lo que lo ha impedido. Es más, la red comarcal ha ampliado el servicio, al conectarse viviendas en varios municipios para paliar la escasez de agua con la que se están encontrando.

La comunidad de aguas de A Toxa también ha optado por embalsar la zona en la que tienen la captación de agua del Umia, provocando problemas río abajo por el escaso caudal con el que circula en zonas como Cabanelas o la desembocadura.

En este mes de noviembre, según los datos recogidos en la estación meteorológica de Meteogalicia en Corón, tan solo se han recogido 53 litros por metro cuadrado en las tres jornadas en las que se registraron lluvias, un dato ínfimo para un mes de noviembre, aunque todavía quedan ocho días por delante en los que las previsiones son favorables a la aparición de precipitaciones.

Uno de los años más secos a estas alturas del nuevo siglo fue 2004, cuando en la misma estación meteorológica se recogieron tan solo 43 litros por metro cuadrado durante cuatro días de noviembre; o 2015, en el que las precipitaciones se quedaron en unos paupérrimos 46 litros por metro cuadrado durante ese etapa.

En Meteogalicia no consideran este mes de noviembre como extremadamente seco, pero si apuntan a que no es normal el escaso bagaje de precipitaciones para esta época del año. Un ejemplo de ello es que, en 2016, un año en el que las precipitaciones no fueron muy abundantes, en el mes de noviembre en la estación meteorológica de Corón se recogieron 159 litros por metro cuadrado durante los 14 días que se registraron precipitaciones.

Octubre

Otro mes que se encuentra catalogado como muy seco para la época del año en la que se está es el de octubre. En la estación de Corón los datos indican que solo se recogieron 53 litros por metro cuadrado en los seis días en los que llovió, una cifra ínfima si se compara con las de años anteriores, como la de 2016 (111 litros por metro cuadrado en nueve días ) o la de 2015 (166 litros por metro cuadrado en 14 jornadas).

Para encontrarse con un mes de octubre con unos registros tan mínimos hay que remontarse hasta hace una década. En aquel año se registró un mes extremadamente seco en el que solo se recogieron 5 litros por metro cuadrado, al localizarse las precipitaciones en tan solo dos jornadas.

En el lado contrario está octubre de 2013, cuando se registraron unas precipitaciones de 359 litros por metro cuadrado, pero aquel mes la lluvia estuvo presente durante 22 de los días del mes.