Dolores Calvo se hizo directiva de Condes de Albarei en 2006 porque un grupo de socios se lo pidieron. Desde hace tres años y medio, es la presidenta de esta cooperativa de Castrelo (Cambados). La acompañan en el consejo rector Marisol Fariña y Marisol Padín. Ambas son vocales, y mientras la primera es directiva desde hace tres años y medio, la segunda entró en la ejecutiva en 2006.

Dolores Calvo plantea que la principal razón de que haya menos directivas mujeres que hombres es la falta de tiempo, ya que tradicionalmente son ellas las que se hacen cargo del mantenimiento de la casa y del cuidado de niños, mayores y personas dependientes. Pero afirma que también hay casos en que las socias se sienten inseguras a la hora de asumir más responsabilidades.

"Tienen capacidad, pero les puede faltar algo de seguridad en sí mismas. Pero para estar en un consejo rector no hacen falta unos estudios especiales, sino sentido común. Cualquier persona que lleve una explotación conoce perfectamente su problemática, y está capacitada para asumir un cargo de responsabilidad".

Afirma que "trabajar en equipo" en un órgano directivo es muy gratificante. "Cuando ganas tú, es satisfactorio, pero si además de ganar tú ganan otras 500 personas, la satisfacción se multiplica". Además, considera que las mujeres no deben culpabilizar a los hombres sobre sus dificultades para acceder a los cargos directivos. "Hay que dar un paso adelante y tener esa fuerza de voluntad".

Eso sí, recuerda a los hombres que cuando confeccionen sus listas electores no piensen en clave de género. "Los socios son personas, no hombres o mujeres".