Las cofradías de A Guarda, Aldán, Baiona, Cangas, Vigo y O Grove, junto con el trío que forman Bueu, Portonovo y Sanxenxo, tienen autorizados para este año planes específicos de explotación del erizo de mar.

Eso en lo que respecta a la provincia de Pontevedra, ya que en la coruñesa hay que hablar de los planes conjuntos de A Coruña-Barallobre, Aguiño-Riberira, Espasante, Ferrol, Lira y del que tienen con carácter mancomunado Malpica, Corme, Laxe, Camelle y Camariñas, junto al que protagonizan Lira, Fisterra y Corcubión.

Es evidente que hay un buen puñado de profesionales del mar que se dedican a la extracción de esta especie. Algo lógico, teniendo en cuenta que la demanda sigue en aumento y que puede alcanzar muy buenos precios.

Esto explica, también, que los socios de muchos de esos pósitos -sobre todo los submarinistas que a lo largo del año capturan navaja- se lancen en esta época a la extracción de este equinodermo, que cada año que pasa se postula con más fuerza para ser uno de los platos estrella en las mesas navideñas.

Para que el lector entienda mejor la importancia de este espinoso marisco puede decirse que el año pasado se vendieron en toda Galicia 693 toneladas por importe de 3,6 millones de euros, y resulta que 254 toneladas y 1,6 millones de euros correspondieron exclusivamente a tres meses de actividad: octubre, noviembre y diciembre.

Fue precisamente en ese último trimestre cuando marcó el precio máximo, con nada menos que 17,60 euros por kilo, según consta en los registros de la lonja de Vigo (Canido), situándose el tope en la rula de Bueu en 15,50 euros, rozando los 15 en Cangas y quedándose en 13 euros en Baiona y en 11,50 euros en la lonja de O Grove.

Con seguridad en la campaña desplegada este año, cuando se han despachado ya 524 toneladas por valor de tres millones de euros, el precio por kilo también empezará a subir desde ahora, ya que actualmente el tope está en los diez euros marcados en Bueu, Cangas y Vigo, quedándose entre los 8 y los 9 euros en Ribeira y Aguiño y sin pasar de los 7 euros por kilo en O Grove.

En este último caso hay que destacar también que, consciente de la importancia del producto, la cofradía de pescadores que dirige Antonio Otero incluyó al erizo de mar en el ciclo de charlas técnicas y degustaciones desarrolladas al abrigo del programa "Lonxanatur", dando a conocer al público las características de la especie y sus posibilidades culinarias.

La grovense y, conjuntamente, las de Aguiño y Ribeira, son las únicas cofradías arousanas con planes específicos de explotación de esta especie. En el primer caso se comercializaron desde el pasado 1 de enero doce toneladas, por importe de casi 67.000 euros, mientras que en las lonjas ribeirenses se logró el mejor resultado de toda Galicia, con más de 101 toneladas y casi 642.000 euros obtenidos por ellas.