El Partido Socialista de Vilanova de Arousa lamentó ayer que este Concello sea uno de los cinco municipios que no participará en el plan de modernización de la administración local de la provincia que ha puesto en marcha la Diputación de Pontevedra. La formación liderada por Javier Dios Pomares, censuraba esta decisión ya que "se le ofreció como a todos, y pese a tratarse de uno de los municipios más endeudados de la provincia, con una deuda que supera los 1.000 euros por habitante, renuncia a que la Diputación le preste un servicio al que está obligado por Ley".

Es más, desde la formación socialista se señala que acogerse a estas iniciativas de modernización de la administración local le supondría al Concello de Vilanova "un ahorro anual superior a los 15.000 euros, por lo que no resulta comprensible esta actitud del grupo de gobierno que dirige Gonzalo Durán".

La propuesta de la Diputación consiste en destinar 1,3 millones de euros para llevar las nuevas tecnologías a todos los municipios, sobre todo porque los de menos de 50.000 habitantes, como es el caso de Vilanova de Arousa, "no disponen de recursos propios suficientes para abordar con éxito la transformación digital, tal y como obliga la Lei de Procedemento Administrativo Común das Administracións Públicas".

A través del proyecto de administración electrónica, se prevé la modernización de 54 municipios de la provincia y dos entidades menores. Hasta el momento, en 52 de estos Concellos, entre los que se encuentran varios de O Salnés, ya se comenzó a implantar el servicio, dando formación a 2.185 funcionarios y a 720 cargos públicos.

La propia Carmela Silva, presidenta de la Diputación, no duda en destacar que "nuestra apuesta por modernizar municipios va más allá y estamos impulsando un nuevo servicio de padrón municipal de habitantes, que está a punto de adjudicarse y permitirá a los concellos mejorar la gestión". Este nuevo servicio incluirá formación a través de un curso para las personas encargadas de su gestión.