Las lonjas de Galicia están a punto de completar un año fantástico. Con la mirada puesta en el tirón navideño, a estas alturas puede decirse que se han pulverizado todos los registros en cuanto a volumen descargado e ingresos obtenidos.

Tanto es así que las 171.000 toneladas de producto comercializadas en la comunidad autónoma en lo que va de año -y eso que son datos aún provisionales, a los que habrá que sumar las ventas de la últimas jornadas aún no registradas en diferentes puertos-, generaron una facturación de casi 381 millones de euros. Esto constituye unos registros que pueden tildarse de históricos, siendo desde luego los mejores de la última década.

El buen tiempo prácticamente todo el año, con ausencia de fuertes temporales que impidieran la actividad, es una de las razones fundamentales del dulce momento que atraviesan las rulas gallegas.

Esas 171.000 toneladas alcanzadas hasta el viernes están muy por encima de las 153.000 toneladas del mismo periodo del año anterior y de las 155.000 de 2015.

También quedan por debajo las 154.000 toneladas de los diez primeros meses de 2014, y desde luego, las 135.000 del año 2013.

Asimismo, en idéntico periodo del año 2012 se vendieron 24.000 toneladas menos que esta vez, fueron 18.000 menos en 2011 y se despacharon 16.000 toneladas menos en 2010.

En el presente ejercicio se superan incluso por 2.000 toneladas las ventas de 2009, mientras que la diferencia es de 28.000 toneladas por encima de lo vendido en 2008.

Con los ingresos, más de lo mismo. En este 2017 se alcanzaron ya los antes citados 381 millones de euros, frente a los 376 millones del año pasado, 353 de 2015, 337 millones de 2014, los 320 millones de euros facturados en 2013 o los 351 millones de 2012.

El buen resultado en primera venta de esta campaña supone conseguir en las rulas gallegas doce millones de euros más que en 2011, 26 millones más que en 2010, 50 millones por encima de la facturación de 2009 y 25 millones de euros más que en 2008.

Vigo, a la cabeza

Buena parte del éxito cosechado en lo que va de año, que puede resultar inmejorable para el sector si las condiciones meteorológicas acompañan en las fechas navideñas, se debe al papel desempeñado por las lonjas de Vigo, A Coruña, Burela y Ribera, ya que son, por este orden, las que mayores ingresos han conseguido.

La viguesa facturó ya más de 87 millones de euros por la venta de casi 34.000 toneladas de mercancía, mientras que la coruñesa se quedó en 62 millones de euros a pesar de haber vendido casi 42.000 toneladas.

Una cantidad similar ingresó Burela, en este caso con solo 18.262 toneladas de producto, mientras que la lonja arousana de Santa Uxía de Ribeira ronda los 32 millones de euros tras despachar 27.333 toneladas. Meritorios son también los 43 millones de euros conseguidos en Celeiro (14.000 toneladas).

Mucha distancia

Lógicamente a mucha distancia se sitúan las lonjas que se limitan a las ventas procedentes de la pesca de bajura y el marisqueo.

En este pelotón destaca O Grove, que ha superado ya los seis millones de euros facturados tras la venta de 652 toneladas de producto, demostrándose una vez más la importancia de determinadas especies que cotizan alto en este puerto. Prueba de ello es que Portosín se quedó ligeramente por debajo de esos seis millones de euros tras vender casi 10.000 toneladas.

Por encima de los cinco millones de euros están Cedeira, Carril, Cambados, Muros y Noia, mientras que A Illa se acerca a esa cantidad. En torno a los tres millones en facturación se sitúan Cabo de Cruz, Camariñas, Campelo, Rianxo y Vilanova, quedándose en algo más de dos millones de euros Aguiño, Bueu, Cangas, Fisterra, Malpica, Marín y Portonovo.