Vilagarcía cuenta con un albergue para transeúntes que gestiona Cruz Roja y un comedor social del que se encarga Cáritas. Ambos servicios se encuentran uno al lado del otro en la Praza da Constitución, por lo que habitualmente las personas sin hogar que pernoctan en el recurso de Cruz Roja suelen comer en Cáritas. El director de la entidad religiosa, Francisco Fernández, observa que en las últimas dos semanas se ha producido "un repunte de transeúntes" en el comedor, es decir, que el aumento de usuarios tuvo lugar antes de que comenzasen las lluvias. Se dispensan unas cincuenta comidas diarias.

La mayoría de estos ciudadanos sin techo son hombres que proceden de fuera de la comarca. Suelen realizar un recorrido por los municipios que cuentan con servicios para personas sin techo, como es el caso de Vilagarcía, Pontevedra o Santiago. En el comedor social de Cáritas pueden alimentarse un máximo de tres días consecutivos; sin embargo los empadronados en Vilagarcía pueden utilizar el comedor sin límite de días. Ahora abre toda la semana a las 13.30 horas para evitar confusiones entre los usuarios -hasta hace unos meses el domingo se comía más tarde que los demás días-.

Mientras que los usuarios habituales van a la Praza da Constitución a la hora de las comidas, los transeúntes acuden antes y esperan en las inmediaciones. "Hablo con ellos y por eso sé que han aumentado mucho", apunta el director de Cáritas Interparroquial de Arousa, Francisco Fernández.

Además del comedor, Cáritas cuenta con una casa de acogida para ciudadanos en situación de exclusión social. Se trata de la Casa de San Cibrán, con capacidad para 14 personas. Ahora hay 8 y están pendiente de entrar otras tres. Estos participantes se encargan del Proyecto Siembra, que consiste en unos invernaderos ubicados en Sobradelo en los que los residentes de la Casa de San Cibrán plantan, cuidan y recolectan productos hortícolas de calidad. También se persigue que adquieran habilidades sociolaborales.

Otros recursos que ofrece Cáritas además del comedor social y la casa de acogida son el ropero, el servicio de peluquería, higiene y lavandería, el comedor sobre ruedas o el proyecto Arrumí para personas de etnia gitana. A ello hay que añadir las intervenciones de atención primaria, donde destacan la orientación y acogida (1.558 personas en 2016), la alimentación (616), la salud (959) y vivienda y organización del hogar (555).

Albergue de Cruz Roja

En relación al albergue de Cruz Roja, tiene capacidad para diez personas y presta servicios de forma gratuita todos los días del año en horario de nueve de la noche a nueve de la mañana, salvo en momentos puntuales, como por ejemplo durante las olas de frío, que se amplía. Los transeúntes tienen servicio de cena y desayuno, alojamiento nocturno, información y acogida, servicio de higiene y, además, todos los viernes se imparten talleres formativos sobre distintas temáticas.