Según los datos correspondientes a 2016, el recibo medio del IBI en Cambados fue de 165 euros (160 de "urbana" y 5 de rústica). Esta es la tercera cifra más baja de O Salnés. Solo están por debajo las de Meaño (152 euros en total, de los cuales 144 son del IBI urbano); y A Illa, con un recibo medio de 153 euros de "urbana" y apenas 10 céntimos de euro de rústica.

La situación es muy distinta en Sanxenxo o Vilagarcía, donde el importe medio de las liquidaciones suman 410 euros. En el caso de Vilagarcía, serían 184 de urbana y 227 de rústica; y en Sanxenxo, 182 por las construcciones, y 228 por las fincas, según los datos facilitados por el propio Xurxo Charlín.

En O Grove, el importe medio de la "contribución" urbana es de casi 220 euros, y en Vilanova de 205, de los cuales 197 corresponden a viviendas o negocios. Finalmente, el recibo medio en Ribadumia fue de 186 euros (180 de urbana), y en Meis de 170, de los cuales 97 corresponden a construcciones.

Estadística por habitante

Charlín añade que según los datos contenidos en la página web del Catastro y en la de rendición de cuentas del Estado, "el Concello de Cambados es el que menor recaudación obtiene del Impuesto de Bienes Inmuebles por habitante". En 2016, el Concello ingresó de media por vecino 117 euros, frente a los 378 de Sanxenxo, o los 260 de O Grove, donde las cuantías se disparan por la existencia de un gran número de segundas residencias de personas empadronadas en otras localidades.

En Meaño fueron 140 euros per cápita; en Meis, 126; en Ribadumia, 160; en Vilagarcía, 153; en Vilanova, 126; y en A Illa, 158. El portavoz municipal de Cambados también defiende la política fiscal del cuatripartito, alegando que durante el último año de mandato del PP, Cambados solo tenía el tercer mejor dato, y que desde entonces hubo rebajas fiscales.

El cuatripartito propone que las terrazas de hostelería paguen menos el año próximo. Según un informe del arquitecto municipal encargado por el gobierno local, el valor de mercado de la superficie a ocupar ha bajado, puesto que ha aumentando el número de negocios, con lo que la rentabilidad de los existentes ahora es menor.

Así, se toma como referencia un valor catastral medio de 17 euros por metro cuadrado.

Con el documento elaborado por Charlín, las terrazas de las calles de primera categoría -las del centro- pasarán de pagar 24,40 euros por metro cuadrado, a 18; las situadas en emplazamientos de segunda, de 18,28 euros por metro cuadrado, a 13; y las del rural, de 12,92 a 10 euros por metro cuadrado.