Manuel Dieste Mos ha muerto. Nació en el municipio arousano de Ribeira en 1967, pero llevaba muchos años asentado y plenamente integrado en O Grove, donde ejerció como uno de los pesos pesados de la depuradora de moluscos Remagro. Era uno de esos hombres emprendedores que se vuelcan en su trabajo y siempre tienen tiempo para sus amigos, caracterizándose desde un punto de vista laboral por su defensa a ultranza del mejillón gallego de calidad, de ahí que se convirtiera recientemente en vicepresidente del Consello Regulador do Mexillón de Galicia.

Francisco Alcalde, el presidente de ese órgano, lo define como "muy buen compañero y firme defensor del sector del mejillón". Pero también dice de él que "era un luchador", de ahí que estuviera peleando hasta el último momento para superar la enfermedad.

Plantó cara a la leucemia, y ni siquiera en los momentos más delicados perdió la sonrisa que le caracterizaba. Ni siquiera dejó de trabajar por completo aún estando de baja, y de hecho bromeaba con ello mientras realizaba gestiones telefónicas desde su cama del hospital. Pero a pesar de su firme disposición a "seguir dando guerra", el corazón de Manolo Dieste dejó de latir, y eso que tras un largo paso por el hospital ya llevaba un tiempo en casa e incluso parecía dar muestras de cierta recuperación.

Muchos lo recordarán por su papel político, ya que fue concejal con el PP de Ribeira e hizo sus pinitos en las filas conservadoras grovenses, pero sobre todo destacó por su trayectoria empresarial y su pasión por el mar.

Su cuerpo es velado desde ayer en la sala 1 del Tanatorio Los Dolores, en Xarás (Ribeira), desde donde será trasladado a las cinco de la tarde de hoy hacia la iglesia parroquial de San Paio de Carreira donde se oficiará el funeral.