Ante las quejas de la comunidad del colegio de infantil y primaria de A Escardia por el insoportable calor en las aulas, superando entre 8 y 10º centígrados la temperatura de la ciudad, la jefatura territorial de Educación que dirige César Pérez Ares, plantea la colocación de toldos en las ventanas con el fin de reducir el exceso de calor.

Pérez Ares ha pedido a los técnicos del departamento provincial de Educación que instalen en las aulas del colegio A Escardia unos testigos que medirán la temperatura para comprobar que ésta excede el máximo permitido en los centros escolares, que es de 27º.

Los padres de alumnos exponen que el problema del exceso de calor en las aulas no es nuevo y que los distintos consejos escolares fueron abordando la situación y remitiendo las quejas a la jefatura de Educación, sin que se resolviera el problema.

Desde la comunidad escolar apuntan que hace dos o tres cursos, tras reiteradas reclamaciones, consiguieron que técnicos de Educación acudieran al colegio a comprobar la diferencia de temperatura que hay en las aulas con respecto al ambiente normal del centro. Pero las mediciones se hicieron en el mes de noviembre, cuando ya se reduce la fuerza del sol sobre la cubierta del edificio y las ventanas de las aulas que dan a la zona este. Aún así, recuerdan que en esa época llegaron a marcarse temperaturas de 27º en esas clases soporíferas, en una época más próxima al invierno.

Los padres de alumnos temen que ahora vuelva a ocurrir una situación similar y que los técnicos de la Consellería lleguen al colegio en épocas de frío, o que esperen a la primavera para constatar el efecto invernadero que se produce en las aulas. Tampoco consideran lógico que se hagan las mediciones a primera hora de la mañana cuando el sol aún está saliendo y no tiene tanta fuerza como cerca del mediodía.

Lo que sí demandan es que se tomen las medidas técnicas que se consideren necesarias para que cuando regrese la época de calor, los alumnos no tengan que volver a soportar temperaturas excesivas que les impiden seguir las clases con normalidad y que provocan mareos y otros síntomas derivados de los golpes de calor.

Por su parte, el portavoz de Esquerda Unida en el Concello de Vilagarcía, Jesús López, ha instado al gobierno municipal a tomar medidas para conseguir que se corrijan las deficiencias en los colegios, como las que denuncian los padres de A Escardia.

López Rodríguez recuerda que en una moción presentada ya hace meses por EU y aprobada por unanimidad en el pleno, se pidieron soluciones urgentes para este problema de golpe de calor en el colegio situado junto a la estación de autobuses.

Por este motivo, solicita al gobierno local socialista que presione ante Educación o encuentre una solución temporal para que los niños puedan asistir a clases con normalidad a pesar del buen tiempo de estos días. "El gobierno municipal tiene que comprometerse con las madres y padres de Vilagarcía y proteger a los más pequeños de la poca sensibilidad de la Consellería con nuestros niños. La lista de despropósitos en los centros es muy larga y hay pocas muestras de que se vayan a solucionar", puso de manifiesto Jesús López.