El monte Penaguda es una barrera que separa las localidades de Meaño y Dena. Cerca de su cumbre, elevada 156 metros sobre el nivel del mar, y en la parte que cae ligeramente hacia el mediodía en su ladera meañesa, se halla una de las rocas míticas del municipio: es la conocida como "Mesa dos Ladróns", un conjunto de piedras que circunvalan una roca central totamente plana en su parte superior y que evoca la forma de una mesa. Hace décadas, cuando este monte carecía de arbolado la "mesa" se divisaba desde la parte baja de Meaño. Desde arriba, para el que se subía sobre ella, la roca hacía las veces de excelente mirador. Pero hoy, invadida por la vegetación, la piedra ya no es fácilmente localizable en el monte.

El por qué del nombre de "Mesa dos Ladróns" refiere un hecho, apenas recordado, envuelto entre la historia y la leyenda. El mismo, referido por algunos ancianos a los cuales les fue legado por sus ancestros, cuenta que en tiempos pretéritos el monasterio de Armenteira sufrió un robo -uno de varios del que fue objeto-, protagonizado en aquella ocasión por un grupo de piratas que atracaran su barco a la altura de Noalla. De regreso, con el botín cargado en mulos desde Armenteira, y Meaño abajo, hicieron escala en el alto del monte Penaguda, a pie de la citada roca. Una vez allí, según la leyenda, encaramados a la piedra, se repartieron el botín, y aprovecharon además el alto para volver de revés las herraduras de los mulos de carga, con el objeto de confundir el rastro a eventuales perseguidores que fueran en su busca. El hecho propició que a partir de entonces los lugareños se refirieran a la piedra como la "Mesa dos Ladróns", nombre que ha llegado hasta hoy en la memoria colectiva.

Piedra de abalar

Otra de las piedras míticas en el municipio meañés es el "Con da Cabalaria", una roca de granito de gran tamaño que preside el alto de Lores y que, también en el pasado, sin árboles y visible desde el pueblo, era punto de referencia y lugar de excelentes vistas sobre la bocana de la ría. Se trata en realidad de una piedra de abalar, esto es, una roca balanceante de gran volumen que, en su caso, se apoya en un único punto sobre otra piedra anclada en suelo. Para hacerla oscilar, el secreto es tumbarse bajo la roca en su cara noroeste y, con la espalda apoyada en el suelo y, levantando las piernas hasta apostar los pies sobre la piedra de abalar, hacer fuerza con ellas hasta lograr que la roca oscile ligeramente.

Ésta y otras piedras de abalar, importantes desde el punto de vista etnográfico y antropológico, están muy arraigadas en Galicia, Bretaña o Francia, donde la tradición las ha ligado a cultos mágico-religiosos, poderes adivinatorios, o a ritos de paso, sanaciones, meigas o druidas.

El "Con da Cabalaria" era precisamente uno de los lugares predilectos del escritor cuntiense Roberto Blanco Torres, a quien se le dedicó el Día das Letras Galegas en 1999, y que entre 1916 y 1928, estando soltero, solía pasar temporadas en Lores -luego más espaciadas- junto junto con sus hermanos Germán, cura de la parroquia, y Leonor, antes de fallecer el escritor paseado por los falangistas en la localidad ourensana de Entrimo en los albores de la Guerra Civi

Una tercera piedra emblemática en el municipio se sitúa en la zona de O Pino, con el llamado "Con das Merendas", un conjunto de rocas de gran tamaño que existe en el lugar, mismo a pie de la carretera interior que sube desde Meaño a Armenteira. En su época era punto de encuentro de los niños que subían con el ganado al monte, algo que rememoran aún los más viejos del lugar. La piedra era punto de partida para juegos y lugar de meriendas de los pastores que se encaramaban a ella.