Superada ya su cuarta semana la vendimia en la Denominación de Origen Rías Baixas puede darse por prácticamente finalizada. Todo lo que se recoja a partir de ahora tendrá una incidencia casi testimonial en relación al volumen total, por lo que cabe hablar de una recolección cercana a los cuarenta millones de kilos de uva, como se explicaba el viernes.

Esta que es la segunda mejor cosecha en la historia del Consello Regulador sirve para confirmar el poderío de la subzona productora de O Salnés y el dominio incontestable de la uva de la variedad albariño.

Prueba de ello es que hasta la una de la tarde de ayer se habían recogido 38 millones de kilogramos de uva, de los que más de 25 millones correspondían a esta comarca arousana.

Esa cifra está muy por encina de la que corresponde a las bodegas de la segunda zona de producción más importante, la de Condado do Tea, que supera los ocho millones de kilos, mientras que en O Rosal se aproximan a los cuatro millones de kilos.

La relación se completa con la subzona de Ribeira do Ulla, que se queda en 434 toneladas de uva amparada, y Soutomaior, con cerca de 75 toneladas de producto en esta vendimia.