Los votos a favor del grupo de gobierno socialista y de los ediles del PP fueron suficientes para sacar adelante la aprobación provisional de la modificación puntual del Plan Xeral de Ordenación Municipal, PXOM en relación con la parcela de la factoría Larsa, en Os Martices. Los representantes del BNG, EU y SM se abstuvieron y el edil no adscrito fue el único que votó en contra.

Esta modificación puntual, que ahora solo está a la espera del informe preceptivo de Urbanismo de la Xunta para su aprobación definitiva, permitirá incorporar en breve plazo al patrimonio municipal la casa solariega, la capilla y el cruceiro que están en los terrenos de la industria láctea Larsa, calificados como bien a conservar, y que fueron la morada de los fundadores de esta empresa.

Otra de las características de la modificación puntual es que reduce el perímetro de protección inicialmente previsto alrededor de la antigua chimenea de Larsa y permite a la corporación láctea la segregación de parcelas de los terrenos de uso industrial que les quedan. La concejala portavoz del grupo municipal del PSOE, Tania García, señaló que la finalidad es ampliar la línea de producción de la factoría.

El concejal no adscrito Miguel Alves expresó su desacuerdo con la desagregación de parcelas por entender que da pie a la venta de las mismas, constituyendo un negocio para la propiedad al margen de la actividad productiva. Recordó que cuando se firmó el convenio urbanístico hace varios años los propietarios de Larsa indicaron que invertirían 5 millones de euros, pero finalmente fueron 3,2 millones. "Ahora van a especular con terrenos que podrán vender individualmente. Esto puede acabar como el caso de Megasa", apuntó Alves.

Los concejales de Somos Marioría, Gaspar González Somoza, del BNG Javier Ríos, y de Esquerda Unida, Jesús López, también mostraron sus reticencias con respecto al convenio urbanístico, pero explicaron que optaban por abstenerse al tener en cuenta que el expediente contaba con el apoyo de la representación de los trabajadores de Larsa en Vilagarcía.

El portavoz del PP, Tomás Fole, que ejercía de alcalde en 2014 cuando comenzó a tramitarse la modificación urbanística argumentó que este expediente se inició con el fin de favorecer los puestos de trabajo y además por cumplir con la legalidad.

Tania García y el propio alcalde, Alberto Varela, manifestaron que en un principio tuvieron dudas en relación con esta operación, que despejaron cuando se reunieron con la empresa y con la representación de los trabajadores. La modificación puntual ha superado la aprobación provisional y será definitiva tras el informe de la Xunta.