El afamado mejillón gallego atraviesa ahora uno de sus mejores momentos del año. Una vez superado el desove y recuperado el rendimiento en las viandas, el producto es objeto de deseo tanto a nivel nacional como internacional, especialmente en Francia e Italia. Esto permite intensificar las labores de descargar tanto para fresco -depuradoras- como para industria, es decir, conserveras y cocederos. En este último caso la campaña de fábrica está en marcha desde hace tiempo, pero va a intensificarse de manera notoria a partir de septiembre.