La Mancomunidad de montes vecinales en mano común de Vilagarcía ha localizado un total de 26 vertidos incontrolados en los montes del municipio, donde se acumula sin control todo tipo de enseres contaminantes como viejos electrodomésticos, muebles, colchones, latas de aceite o escombro de obras, incluso sobre manantiales de los que se abastecen los vecinos.
Además representan un probable foco de incendio, por lo que los comuneros decidieron enviar a la Xunta -ya en el mes de marzo- el informe que elaboraron sobre los vertidos para que los eliminase lo antes posible de los pulmones verdes del rural vilagarciano.
Pero sus intentos han caído en saco roto. Aunque en un primero momento los comuneros manifestaron su deseo de que la administración fuese receptiva y actuase antes del verano, estamos en agosto y la respuesta ha sido nula. "Entregamos el documento pero no tuvimos ninguna comunicación por parte de la Xunta. Nada, ni caso", lamenta el presidente de la Mancomunidad, Xurxo Abuín.
Casi la mitad de los vertidos detectados en ese mapa se encuentran en la parroquia de Cea (12), que es la comunidad de montes con una mayor superficie de terreno, con mucha diferencia de las demás. El resto se reparten entre Rubiáns (7), Sobrán (3), Trabanca Badiña y Guillán (2) y Trabanca Sardiñeira (2).
Si bien no son basureros de enormes dimensiones, sí son continuos y persistentes, según advirtió en su día la secretaria de la Mancomunidad y presidenta de la comunidad de montes de Trabanca Sardiñeira, María del Carmen Piñeiro.
"Cada vez que limpiamos un vertido, asistimos impotentes a su reconstitución en un cortísimo plazo, en ocasiones de menos de un mes", lamentaban los comuneros cuando dieron a conocer públicamente el mapa de vertederos ilegales en los montes vilagarcianos.
