La fiesta de la carne de potro de Meis no se celebrará hoy, después de que la Consellería de Sanidade inmovilizase a última hora de la mañana de ayer unos 300 kilos de mercancía. El portavoz de la asociación organizadora del evento, A Carballeira, explicó a FARO pasadas las 21.00 horas que aunque por la tarde estuvieron pendientes de solventar el problema administrativo con la Xunta, "aunque nos levantasen ahora el precinto ya no nos daría tiempo a organizar la fiesta", por lo que decidieron cancelarla, pese a que contaban con otros 400 kilos de mercancía a mayores de los inmovilizados.
El Ayuntamiento tampoco era partidario de que se celebrase la fiesta, pese a que su papel en la misma se limitaba a colaborar con la publicidad y la cesión de la carpa. Este periódico intentó sin éxito hablar con el alcalde, José Luis Pérez, si bien su jefe de gabinete aseguró a las 21.00 horas que el Concello no permitiría el evento, y que si A Carballeira llevaba a cabo la fiesta, la administración local los denunciaría "por usurpación de un espacio público".
La Consellería de Sanidade explicó a media tarde de ayer que la inmovilización se produjo "por falta de garantía sanitaria" de 300 kilos de carne, pues "los responsables de la mercancía no presentaron la documentación que acreditase el correcto almacenamiento, manipulación y despiece de las carnes frescas de equino inmovilizadas, entre el momento que salieron del establecimiento de sacrificio y su destino en el local de elaboración". "Por lo tanto, no se pudo garantizar su trazabilidad y el mantenimiento de la cadena de frío", añade Sanidade en su comunicado.
Al parecer, los técnicos del servicio de Control de Riscos Ambientais de la jefatura territorial de Pontevedra y agentes del Seprona de la Guardia Civil se presentaron a última hora de la mañana en el colegio de Mosteiro, que es donde se estaba preparando la carne, y tras ver que presuntamente faltaba documentación de la misma, ordenaron inmovilizarla.
La versión de A Carballeira es que la medida fue desproporcionada. "Estaba todo perfecto. Esto no tiene ni pies ni cabeza. No hicimos nada grave". Añade que "el único problema es que estábamos preparando la carne en el colegio, en vez de en una sala de despiece. Pero es que eso es lo que se hizo durante los 16 años anteriores de la fiesta, y nunca pasó nada. Nos tocó a nosotros".
Meis acoge desde la década pasada una fiesta de degustación de la carne de potro. Pero siempre la organizó una asociación del lugar de Zacande (parroquia de San Vicente), que aprovechaba el evento para recaudar fondos para sus fiestas patronales. No obstante, este año renunciaron a la organización de la cita, y hace apenas un mes tomó su relevo la asociación A Carballeira, de reciente creación. A Carballeira apunta que "estábamos haciendo bien las cosas. Otros años preparaban la carne los mismos vecinos, y este año loo estaba haciendo gente que trabaja en carnicerías y mataderos, que tienen el título de manipulación de alimentos".
