El futuro peatonal del casco urbano de A Illa está un paso más cerca. La corporación municipal aprobó en la noche del pasado jueves un documento encaminado a convertirse en el modelo a aplicar para conseguir reducir a la mínima expresión la presencia de vehículos a motor en entornos como la plaza de O Regueiro. El Plan de Mobilidade Urbana Sostible (PMUS) recibió la aprobación con el objetivo de presentarlo a una serie de subvenciones que habilita la Unión Europea, tendentes a transformar los espacios urbanos en lugares mucho más amables para los peatones.
El plazo para optar a estas subvenciones se abre el próximo miércoles y A Illa no quiere dejar pasar el tiempo, ya que tiene previsto presentar el proyecto lo antes posible para optar a una inversión que podría alcanzar el millón de euros si la Unión Europea da el visto bueno a su propuesta. En la redacción de este borrador no solo han participado los técnicos de la empresa que lo ha redactado y los municipales, sino que también se les ha abierto las puertas a todos los vecinos que, a través de la página web del Concello, podía aportar todo tipo de sugerencias de cómo quieren que se peatonalice el casco urbano. Iglesias explicaba en el pleno que "es un documento vivo, abierto a posibles modificaciones que sirvan para mejorar un proyecto que pretende incrementar los espacios públicos para los peatones". De hecho, el grupo de gobierno y los técnicos mantuvieron varios encuentros con las entidades sociales y económicas del municipio para abordar esta cuestión, encontrando un caldo de cultivo muy favorable a la iniciativa.
Si se lleva a cabo el proyecto, su aplicación supondrá una importante transformación del casco urbano, arrancando la peatonalización en la plaza de O Regueiro, al tratarse del espacio de ocio y esparcimiento más importante del municipio, para ir expandiéndose por las calles adyacentes.
El Concello está trabajando ahora en la instalación de medidores eléctricos que contabilicen el número de vehículos que transitan no solo por el puente de A Illa, sino por determinadas calles con el fin de conocer a la perfección qué tipo de tráficos acogen y si es posible desviarlos hacia otras alternativas menos invasivas para los peatones.
Parque Aransa
El grupo de gobierno respaldó una moción del Partido Popular en la que se pedía mayor seguridad en el recinto del parque de Aransa. Los conservadores demandaban inversión para un cierre más seguro y una mejor dotación de elementos para ser utilizados por los más pequeños.
