La calle Rey Daviña se vistió ayer a la mañana con los colores de la bandera multicolor en un acto que sirvió, entre otras cosas, para normalizar la presencia del colectivo LGTBI. Las integrantes del proyecto Lésbicas Creando instaron a los viandantes a posicionarse con el colectivo homosexual a través de mensajes que los presentes dejaban en una pizarra. Con el hastag #posicionatecoorgullo todas aquellas personas que participaron de la actividad transmitieron mensajes sobre la identidad, el respeto y la tolerancia hacia la homosexualidad. También hubo dibujos, encuestas y reflexiones por parte de turistas y vecinos que se interesaron por la iniciativa.
Mai Ínsua, psicóloga, terapeuta sexual y miembro de Lésbicas Creando aseguraba ayer que mediante estas actividades propuestas desde el colectivo, "se da seguridad a los espacios públicos, que a menudo son zonas donde gays y lesbianas están expuestos a agresiones, sobre todo verbales".
La razón de no hacerlo coincidir con las celebraciones del orgullo se debe a una necesidad de deslocalizar este tipo de acciones e integrarlas en la vida cotidiana de las ciudades.
Mensajes de buen trato y de libertad a la hora de relacionarse, eso es lo que buscan las personas que se encuentran detrás de Lésbicas Creando con la intención de conseguir una transformación en el pensamiento y las actitudes de la población. El año pasado la actividad llevaba por nombre "Abraza a una lesbiana" , y tuvo mucho éxito, explica Ínsua.
El colectivo organiza además otras actividades a lo largo del año relativas a formación de autodefensa feminista que las lleva a recorrer Galicia y Portugal.
Por el espacio que instalaron ayer en Vilagarcía pasaron muchas personas, madres con niños, ancianos, familias, y siempre con muy buen gesto. "Lo que conseguimos con la actividad al final es sentirnos arropadas", señalan, y en general lo consiguieron, aunque también hubo personas que declinaron la invitación a implicarse. Fuera de eso, no hubo nada negativo que destacar en una jornada en la que homosexuales y heterosexuales se mostraron una tolerancia mutua, que empieza a ser cada vez más normal en nuestro país.
