El alcalde de Catoira, Alberto García García, y el escultor Juan Carlos Platis, acompañados por los concejales de Cultura y Deportes, del municipio, presentaron ayer en el nuevo Auditorio Municipal de Catoira la Romería Vikinga que se celebrá a partir del 25 de julio.
La 57º edición de la fiesta contará con la incorporación de una comparsa de cabezudos y gigantes vikingos creados por el artista arousano Juan Carlos Platis. "Es una aspiración que teníamos desde hace años y pretendemos seguir incorporando personajes en las futuras ediciones" asegura el alcalde catoirense. Las esculturas representan a los distintos personajes históricos relacionados con las leyendas vikingas de la localidad.
Entre ellos se encuentra uno de los personajes más representativos de la Edad Media en Galicia, el primer arzobispo de Santiago: Diego Gelmírez, nacido en las fortificaciones catoirenses construídas para defender el sepulcro del Apóstol y los tesoros guardados en Santiago de Compostela frente a los ataques normandos. Otras de las figuras representadas corresponden a vikingos famosos como puede ser Ulfo, apodado "el gallego", precisamente por sus incursiones en diversas poblaciones de la costa arousana. "En los próximos años introduciremos nuevas figuras, entre las que estarán personajes importantes en la organización de la romería" indica Alberto García.
Escultor arousano
Las esculturas, que se realizaron bajo un presupuesto de 7.000 euros, fueron realizadas por el escultor y pintor arousano Juan Carlos Platis, quien tiene su propio taller en Vilaxóan. "Tuve que documentarme sobre los vikingos para poder representarlos y adaptarlos a la realidad. Hoy en día se deforma mucho la imagen de los vikingos, tal y como se hizo con Papá Noel" asegura el escultor.
Platis comenzó el proyecto a principios de enero siguiendo un meticuloso proceso de creación. "Una vez que ya estás documentado todo comienza con el modelado, lo demás consiste en el dominio de los materiales, desde los moldes de escayola hasta el manejo del poliéster" indica Platis. La utilización de este material tiene como objetivo reducir el peso de los cabezudos para que "la gente los pueda llevar sin dejar de disfrutar en la fiesta".
