Los problemas con el agua en O Grove empiezan a tomar un cariz, cuando menos, preocupante. Aún hace apenas dos días los vecinos resultaban afectados por una avería que los dejaba seis horas sin agua debido a la rotura de una tubería, cuando de nuevo se vuelve a repetir la situación.

El miércoles por la tarde la rotura de otra canalización dejaba durante cuatro horas a los vecinos del barrio de O Sineiro, y ayer por a media tarde los damnificados eran los vecinos y sobre todo veraneantes de la zona de Pedras Negras. La concejala de Obras, Ángeles Domínguez, aseguraba ayer que las reparaciones se están realizando con la mayor rapidez posible, pero que dada la época del año en la que nos encontramos y con el mal estado en que se encuentran toda la red "poco se puede hacer más que arreglar las averías para pasar el verano". El problema es que dado el número de personas que habitan estos meses en el municipio, la presión del agua es insuficiente para todos.

Según ha explicado Domínguez, la intención del concello es empezar a cambiar la red en cuanto sea posible, de hecho al finalizar la temporada estival, el gobierno se dispone a abrir Castelao y cambiar las tuberías, "pues es una de las calles en que peor estado se encuentran". La obra se realizará gracias a una partida del Plan Concellos, y puede que con ella se proceda a la tan ansiada peatonalización de Castelao.

El objetivo del gobierno presidido por José Antonio Cacabelos no es otro que ir cambiando la red de alcantarillado progresivamente para que estos problemas no se sigan sucediendo. "Es una de las prioridades de nuestro gobierno", explicaba ayer la concejala de Obras del municipio.

A Illa

No solo la península meca sufrió esta semana problemas de abastecimiento de agua. En A Illa de Arousa ayer se producían también dos roturas que producían cortes en el municipio.

Uno de ellos, el más pequeño se producía en la Avenida da Ponte, y los operarios municipales tardaban poco tiempo en subsanarlo. La avería más grande se producía junto a la Galescola y que afectó a una parte mayor de la población. Al igual que en O Grove, la cantidad de gente alojada en la localidad que hace uso del agua en estos días, provoca que la presión no llegue para abastecerlos a todos, y hace que un momento dado las tuberías no den más de sí y se rompan, aunque se trata de incidentes puntuales que fueron arreglados con rapidez.