El gobierno socialista de O Grove elabora una nueva ordenanza de tráfico. Es aún un borrador, pero ya está en manos de los grupos de la oposición para que la consulten y presenten las sugerencias oportunas. En breve se elevará a pleno y, una vez aprobada, servirá para limitar a 30 kilómetros por hora la velocidad en el centro urbano, como también para disponer de un servicio de grúa que en verano funcione las 24 horas del día.

Así lo explica el alcalde, José Cacabelos Rico, quien además esgrime que "esta ordenanza trata de implementar nuestro proyecto de humanización de calles, pues nuestro objetivo, como hemos demostrado hasta ahora y seguiremos haciendo en el futuro, es dar prioridad absoluta a los peatones, favorecer el desarrollo comercial de la villa y garantizar la seguridad del conjunto de usuarios".

Es por ello que el propio Cacabelos aclara a los vecinos que "se trata de recuperar las calles para ellos, y para eso tenemos que modificar la ordenanza de tráfico existente, porque tiene más de veinte años y es preciso adaptarla a los tiempos modernos".

Peatonalizaciones

En este sentido, el regidor incide en que "antiguamente puede que la prioridad fueran los coches, abrir nuevas carreteras y cuestiones similares, pero hoy en día lo prioritario es pensar en los peatones".

De ahí que el nuevo articulado quiera limitar la velocidad a 30 "en la mayor parte del casco urbano", pero también adaptar las normas a las modificaciones realizadas o previstas en cuanto a peatonalización de calles, como por ejemplo Castelao.

Igualmente, "hay que regular el tráfico atendiendo a las calles en las que vamos a permitir acceso solo a residentes, a los que entregaremos una tarjeta para que solo puedan pasar los vehículos autorizados", detalla Cacabelos.

Realidad social

Se trata, en definitiva, de "una ordenanza de tráfico que se adapte a la realidad social actual y beneficie sobre todo a los peatones y residentes, pero también a la importante zona comercial que tenemos en el centro de la villa".

Mención especial merecen los apartados de esta nueva ordenanza relacionados con la inmovilización y retirada de vehículos.

En este caso el gobierno local pretende crear una tasa que garantice el funcionamiento de la grúa municipal.

Cacabelos explica que "ahora mismo si alguien aparca delante de un vado se le impone una multa, y lo que queremos es habilitar una tasa para poder retirar el vehículo, y de este modo si la grúa tiene que intervenir el infractor tendrá que pagar tanto la sanción por estacionar mal como el servicio de grúa".

La intención del gobierno es que esta ordenanza se haga efectiva en los próximos meses, "o como muy tarde el año que viene, con la intención de tener servicio de grúa todos los días del año e incluso ofrecerlo las 24 horas todos los días de verano".

Autofinanciación

El regidor es consciente de que, actualmente, si es preciso usar la grúa se recurre a algunos de los conductores del ayuntamiento. Como lo es de que su utilización es mínima.

Con la aplicación de la tasa que se plantea en la nueva ordenanza de tráfico puede que se financie la totalidad del servicio.