Los padres del colegio de O Piñeiriño (Vilagarcía) cuyos hijos cursarán a partir de septiembre sexto de Educación Infantil (cinco años) advierten a la Consellería de Educación de que no se rendirán hasta conseguir el profesor de apoyo al que consideran que tienen derecho. Así lo afirmaron tras la manifestación que les llevó desde el colegio hasta la plaza de Galicia, en pleno centro de la ciudad.

La marcha fue muy poco concurrida, pues apenas participaron una veintena de familias, pero sí muy ruidosa. Adultos y niños querían dejar constancia de su malestar con la Xunta de Galicia, y que los vecinos de la localidad conociesen su demanda. De modo que se armaron de panderetas, silbatos e instrumentos musicales de juguete, de modo que su paso por las calles de Vilagarcía no pasó inadvertido en ningún momento.

Los progenitores piden a la Consellería de Educación que mantenga la plaza de un profesor de apoyo que sí ha habido este año en sexto de Infantil. Argumentan al respecto que a partir de septiembre el curso tendrá 25 alumnos, frente a los 24 del actual, y que de esos niños, tres tienen necesidades educativas especiales. Consideran que un solo profesor no será capaz de llevar en buenas condiciones un aula con tantos alumnos y con algunos de ellos con necesidades especiales, y que eso perjudicará tanto a estos últimos, que no podrán recibir un tratamiento tan individualizado, como a los demás, ya que el ritmo habitual de las clases podría verse alterado.

Por ello, lo que solicitan a la Xunta de Galicia es que o bien les mantengan la plaza de un profesor de apoyo, o bien que se hagan dos clases con esa de 25, de modo que al dividir los niños en dos unidades los profesores puedan atenderlos en mejores condiciones.

Pero por el momento la Consellería de Educación no está por la labor. En un comunicado de prensa, ha respondido que el centro de O Piñeiriño tiene los profesores que necesita para su actividad.

Sin excursiones

Antes de la manifestación, los padres afectados celebraron una asamblea en el colegio con la dirección, donde les explicaron que no es cierto que los docentes de que disponen actualmente sean suficientes para hacer los apoyos en Infantil. Según los afectados, la actual situación podría obligar a suspender excursiones y salidas educativas, y poner en peligros los trabajos por proyectos en los que O Piñeiriño se ha volcado en los últimos años.

Sobre las 20.30, padres y alumnos salieron del colegio con una gran pancarta en la que se leía el lema "Os nenos non son números".

Un representante de los progenitores explicó al llegar a la plaza de Galicia que "estamos aquí porque tenemos que pelear un poco. Vosotros veis lo frustrante que es esta situación". "Queremos llegar a un acuerdo de mínimos y nos encontramos la callada por respuesta", añadió. Dijo también que "solo queremos lo mejor para nuestros niños, que tienen tres, cuatro y cinco años", y que "nos quedan unos días más de lucha. A este hombre se le tiene que ablandar un poco la sensibilidad", en alusión al jefe territorial de Educación en Pontevedra, César Pérez Ares.