La campaña del centollo -como sucede con la del buey de mar- ha finalizado con un éxito notable en cuanto a ingresos en lonja. El "rey de los mariscos" ya está oficialmente en veda -desde hoy- y no podrá pescarse ni comercializarse hasta el 13 de noviembre, al menos en las provincias de A Coruña y Pontevedra.
En la lucense esta prohibición se extenderá desde el próximo 1 de julio hasta el 3 de diciembre, aunque evidentemente la significación de esta especie en esas rulas es menor que en la fachada atlántica, y desde luego su protagonismo es muy inferior al que alcanza en las Rías Baixas.
Se despide de lo mercados, y con ello la flota de enmalle que se dedica a su captura debe centrarse en otras especies y artes, después de generar en lonja 3,6 millones de euros tras la venta de 264 toneladas.
Así consta en la plataforma tecnológica Pesca de Galicia, con datos aún desactualizados. Esto supone que faltan por incorporar las operaciones de primera venta realizadas en numerosas lonjas durante las últimas jornadas, de ahí que el balance vaya a aumentar ligeramente y pueda hablarse de una facturación final de cuatro millones de euros, que no está nada mal.
Los altos precios alcanzados en las subastas compensaron la escasez de producto, especialmente en lonjas tan importantes para este recursos como la de O Grove, que marcó un precio máximo de 45,5 euros por kilo.
En este puerto se ingresaron desde que comenzó la campaña, en noviembre, 737.000 euros por la venta de 39 toneladas de centollo; repitiendo una vez más como el punto de venta más importante de Galicia junto al puerto de A Coruña, que llegó a 759.000 euros tras despachar 75 toneladas.
También pueden citarse los 490.000 euros (35 toneladas) del puerto de Ribeira y los 195.000 euros facturados en la lonja de Vigo por la comercialización de trece toneladas de este crustáceo.
Respecto a otros puntos de primera venta en Galicia, cabe decir que Cambados llegó a los 329.000 euros y que Burela rondó los 319.000.
Pero todo esto ya es historia, puesto que, como queda dicho, el centollo ya está vedado. Es así de acuerdo con el plan de gestión diseñado por la Consellería do Mar y el sector para la campaña 2017-2018, la cual establece que el período de veda en las provincias de A Coruña y Pontevedra abarque desde las 00.00 horas del hoy hasta las 00.00 horas del domingo 12 de noviembre", lo cual significa que será entonces cuando se larguen nuevamente los miños para que el centollo empiece a llegar a puerto el día 13. Más tarde lo hará en la provincia de Lugo, donde la veda no empieza hoy, sino a las 00.00 horas del 1 de julio, para finalizar a las 00.00 horas del domingo 3 de diciembre.
Y se adopta la decisión de frenar la explotación de este crustáceo, consensuada con el sector pesquero, "para aumentar la biomasa y regular la pesquería del centollo y del buey con el fin de ajustar la gestión pesquera al ciclo de vida de las especies y así proteger su reproducción y contribuir a una explotación más sostenible".
Así lo indican en el departamento que dirige la conselleira Rosa Quintana, donde hacen hincapié en que con la veda que arranca hoy en la fachada atlántica "queda expresamente prohibida la captura de estas especies para todas las embarcaciones con artes menores y con puerto base en nuestra comunidad, como también para aquellas que, teniendo puerto base en otras comunidades, dispongan de permisos especiales de pesca para faenar en aguas gallegas".
Ni que decir tiene que servicios como Gardacostas de Galicia van a permanecer expectantes para que se respete la veda y evitar la pesca de centollo, especialmente demandado por los turistas en verano a pesar de la prohibición. No está de más recordar que los amantes de este marisco van a tener disponible muy pronto otra especie tan interesante como la nécora.
