Los distintos grupos de la oposición en la Corporación de Meaño cuestionaron en el pleno de esta semana la idoneidad de los terrenos elegidos por el grupo de gobierno para construir una plaza pública en Dena, los cuales saltaban a la luz a raíz de una información publicada por FARO DE VIGO el pasado domingo.

Tanto los socialistas liderados por Icía García como los independientes de Aspérez Montes, que hicieron mención a esta publicación, coincidieron al señalar que, en su opinión, el lugar elegido es un espacio que resulta insuficiente para las necesidades que tiene la que es localidad más grande del municipio.

Sobre el particular la edil Icía García preguntó a la regidora Lourdes Ucha si el grupo de gobierno había barajado otras ubicaciones para la citada plaza, y el independiente Pepe Varela apostilló sobre la potencial peligrosidad del lugar "pensando en que Dena pueda hacer ahí sus fiestas, dado que es un terreno a pie de la carretera Po-550 y en una intersección ya de por sí bastante peligrosa".

La alcaldesa Lourdes Ucha reconoció que el grupo de gobierno había estudiado otras posibilidades, "y esta por la que optamos -aseguróel concejal popular- creemos que consta de terreno suficiente para lo que nosotros pretendemos y se ajusta a las necesidades de la parroquia".

Cabe recordar que los terrenos elegidos con esta finalidad, y que se hallan en fase de negociación, son tres parcelas en Ponte Dena que suman un total de 2.455 metros cuadrados, situados a pie de lacarretera Po-550, justo al lado del puente sobre el río A Chanca.

Su compra supondría al concello el desembolso de 122.750 euros. Con todo la adquisición de la parcela más grande, de 1.397 metros cuadrados y perteneciente al grupo Inferga, ha sido valorada en 69.850 euros, mientras que las otras dos, ambas de titularidad particular, tienen una superficie de 1.012 metros cuadrados y 46 metros cuadrados siendo valoradas en su caso en 50.600 euros y 2.300 euros respectivamente.

Se trata de un área tipificada en el PXOM meañés como zona verde, por lo que la normativa impide edificar en ella y sólo pueden ser destinada a parques públicos o similares, de ahí que cuadre con el uso que el concello pretende para la zona en cuestión.

La construcción de esta plaza, que se pretende sirva también como área de estacionamiento para vehículos, responde a un compromiso electoral del Partido Popular en las pasadas municipales, y el gobierno local se había marcado 2017 como el año para iniciar las obras.

Durante el pleno también se abordó el polémico proyecto para la reconstrucción del pabellón de Xil, inutizado desde 2015 debido a que un fuerte viento derribó parte del inmueble. Los ténicos han constatado los defectos que sufre el inmueble, sobre todo la fragilidad que sufren los cimientos por lo que en la actualidad es inviable poner en marcha el proyecto presentado con anterioridad.

Lourdes Ucha es optimista pero la oposición sabe que no estará listo hasta el próximo año.

El edil independiente Pepe Varela criticó también en el pleno la obra ejecutada por la Xunta de Galicia por la que se dotó la Po-303 a su paso por las localidades de Meaño y Simes de una capa capa de rodadura denominada "slurry asfáltica", mezcla bituminosa que mejora la rugosidad del asfalto permitiendo incrementar la adherencia del neumático al pavimento.

"Es un firme al que muchos concellos ya se están oponiendo -apuntaba Varela- porque, además de ser un quema-ruedas, el paso de los vehículos genera un ruido muy molesto para los vecinos de viviendas colindantes a la carretera, que tienen la sensación cada vez que pasa un coche de que se están arrastrando cajas sobre el asfalto".

Unas críticas que también se repetían estos días en O Grove donde, ante las quejas de los vecinos de la calle Xoan XXIII, dotada también de este tipo asfalto, la Consellería de Infraestructuras ha procedido incluso a medir los ruidos con un sonómetro.

Sus detractores del "slurry asfáltico", apuntan que es un pavimento adecuado para autopistas y autovías, que carecen de viviendas en sus inmediaciones, pero nada aconsejable para zonas urbanas con viviendas a pie de carretera por el ruido que genera al paso de vehículos.

Los vecinos suelen ser partidarios de la eliminación de esas capas de rodadura en las zonas habitadas porque es en las que se causa mayores trastornos por el ruido.

El material empleado fue propuesto por la Diputación.