El alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, se compromete a resolver los problemas de seguridad vial en la vieja carretera de Bamio que los vecinos llevan tiempo denunciando. Así se lo trasladó ayer el regidor socialista al portavoz del grupo municipal del BNG, Xabier Ríos, que desde el principio se ha implicado para intentar satisfacer esta demanda vecinal.
La solución a los excesos de velocidad y al consecuente peligro que afrontan los viandantes de Bamio vendrá dada por la instalación de semáforos y un paso de peatones en las inmediaciones de la parada del autobús de O Salgueiral, según apunta Ríos. Se trata de la primera opción que plantearon los vecinos desde el principio y que el alcalde también considera como la más adecuada, por lo que mediará con la Xunta para que lleve a cabo la actuación, ya que es la administración autonómica la titular de la citada calzada.
No obstante, el concejal nacionalista asegura que Varela le trasladó su compromiso de asumir los semáforos en el caso de que el Gobierno gallego no atienda la petición de Vilagarcía.
La idea es pintar un paso de cebra y regular el tráfico en ese punto con dos semáforos -uno en cada sentido de circulación- que tengan pulsador para peatones. Además, estas medidas de seguridad vial se completarán con "dos avisadores" -agrega Ríos-, es decir, dos semáforos que en las proximidades del paso parpadean en ámbar para advertir a los conductores de la cercanía de una zona de tránsito peatonal.
El portavoz del Bloque espera que estas medidas se implanten cuanto antes. Las que parecen más lejanas son las que atañen a la deficitaria conexión a pie entre Bamio y Carril. Se trata de un trayecto sin aceras en un buen tramo, por lo que los vecinos se ven obligados a transitar por la carretera.
Como medida provisional a la prolongación de las aceras, solicitaron al Ayuntamiento que adecentase el camino que discurre por detrás de la gasolinera de O Salgueiral. Aunque muchos residentes ya lo utilizan en la actualidad, el terreno es demasiado abrupto para que puedan pasar sillas de bebés, de ruedas o carros de la compra, por ejemplo. En este sentido, Xabier Ríos apunta que el Concello está pendiente de un permiso para poder limpiar el sendero, ya que una parte pertenece al departamento de Carreteras de la Xunta.
En cuanto a la construcción de las aceras pendientes en la vieja carretera de Bamio, los servicios técnicos del Ayuntamiento se encargan de redactar un proyecto para entregar a la Xunta con el fin de agilizar los trámites y mostrar la voluntad de colaboración municipal en este asunto. Además de las aceras, ese proyecto incluirá la pavimentación del camino que pasa por detrás de la gasolinera, aunque provisionalmente será adecentado por la administración local una vez cuenta con el visto bueno de Carreteras.
