El gobierno de O Grove presentó ayer al Consello de Turismo el informe sobre las cuentas definitivas de la Festa do Marisco 2016. Como es habitual existe un déficit -se eleva a 185.000 euros-, ya que no cabe duda de que en ciertos aspectos este evento gastronómico es una especie de "monstruo" que cuesta trabajo mantener. Pero no se trata de unas pérdidas tan importantes como las que denunciaba el PP, ni se habrían realizado desembolsos carentes de justificación.

A modo de resumen puede decirse que las actuaciones musicales contratadas el año pasado, pero también el alquiler de una carpa-auditorio que permaneció operativa hasta noviembre, contribuyeron de manera decisiva a incrementar los gastos.

Así lo explicó la edil de Turismo, Emma Torres, encargada junto al alcalde José Cacabelos de desmenuzar el informe económico, en el que se aprecia que la compra de producto se lleva 180.000 euros, que las actividades culturales y de ocio conllevan un gasto de 120.000 y que montar las carpas se queda 95.000 euros del presupuesto.

En este sentido, es de destacar que el año pasado el concello tuvo que incrementar el gasto en compra de producto porque se hizo cargo directamente de más puestos de venta.

Emma Torres incidió en ello, como también en "la apuesta por la mejora de la calidad de estos productos, lo que supone trabajar con márgenes de beneficio muy estrechos". Esa calidad de la que habla "también fue la máxima aplicada en la contratación de la programación musical".

De la reunión de ayer puede extraerse, igualmente, que desde O Grove reclaman una mayor ayuda por parte de las demás Administraciones públicas, desde el convencimiento de que la Festa do Marisco tiene repercusiones muy positivas no solo en O Grove, sino en toda Galicia.

En el gobierno aprovechan para destacar que ahora se hacen públicos todos los datos económicos, "a diferencia de lo que hacía el PP".