Con un formato similar al aplicado por la Diputación de Pontevedra, el plan de incentivación del turismo del gobierno socialista de O Grove permitirá hacer una selección entre los proyectos presentados para ver cuál se ajusta a las necesidades reales del pueblo y cuál es susceptible de ser cofinanciado.

A modo de ejemplo puede decirse que en el momento de valorar una propuesta puntuará a su favor el hecho de desarrollar el proyecto turístico en cuestión en temporada baja, es decir, que no ayudará demasiado querer desplegar una actividad durante la Festa do Marisco o en pleno verano.

Como también puntuará el hecho de contar con la colaboración de los colectivos sociales o culturales y con los clubes deportivos.

Convencida de la idoneidad de esta idea, la concejala Emma Torres señala que las ayudas para acciones turísticas se convocarán todos los años -en caso de que tengan buena acogida y resulten útiles-; al igual que apunta que "se trata de favorecer la colaboración entre empresas y colectivos, pero también entre todos ellos y el Concello, buscando fórmulas que nos ayuden a atraer visitantes y a generar negocios en los meses más flojos del año".

Cree también que este reglamento es un modo de regular "algo que se estaba haciendo de manera desordenada y poco objetiva".