Tanto Xurxo Charlín como Constantino Cordal, de Somos, hicieron una lectura en clara clave política de la "guerra fría" en la que están inmersos el Ayuntamiento de Cambados y la Xunta de Galicia. Charlín afirmó que "los vecinos ya se han dado cuenta de que la Xunta nos está boicoteando", y aseguró en referencia al pacto de gobierno de Sanxenxo que "el PP pretende comprar las Alcaldías con obras públicas de la Xunta que se financian con el dinero de todos los ciudadanos".

Constantino Cordal, por su parte, se refirió a la afirmación de Aragunde de que si él gobernase abriría el centro de día "en un mes". "Le agradezco que reconozca que el centro de día no está abierto porque el PP no quiere porque en Cambados gobernamos nosotros". "Aragunde está desenmascarando a su partido y descubriendo su estrategia, que es recuperar el poder sea como sea, aún a costa de perjudicar a los vecinos".

Ciudad Europea del Vino

El PP también criticó con dureza la gestión de la Ciudad Europea del Vino. Aunque sobre este asunto solo se detuvo Charlín. El portavoz municipal afirmó que "hemos llamado por teléfono y hemos enviado docenas de correos electrónicos a la directora de Turismo de Galicia y ni siquiera nos contesta".

Los conservadores cuestionaron el hecho de que todavía no hay un programa de actividades de la Ciudad del Vino y que se tardasen seis meses en convocar una comisión organizadora en la que, al final, lo único que se hizo fue firmar la constitución. José Ramón Abal, que es el concejal de Enoturismo, prefirió evitar la refriega política en este asunto.