A Beatriz Castro Vidal, recientemente proclamada presidenta de la agrupación local del PP de O Grove, le llueven las críticas por todas partes. Su presencia en todo acto público que se organice -dentro y fuera de la localidad- empieza a generar malestar, sobre todo cuando acude en representación de su partido a actos en los que ni siquiera está invitada o cuando trata de ostentar una posición de privilegio que en realidad no le corresponde, ya que el representante oficial de su formación, como concejal electo que es, sigue siendo Miguel Pérez García.

Esto que muchos ven como "exceso de protagonismo" o "ansias de poder" provoca que el grupo municipal socialista salte a la palestra con un comunicado público en el que carga contra la presidenta conservadora y denuncia su "mala educación institucional" y su "prepotencia".

Para entender esta reacción hay que decir que recientemente Beatriz Castro participó en Santiago en la entrega del Premio Lola Torres de Gastronomía Tradicional. Se colocó en la foto de familia junto a las autoridades invitadas, lo cual llevó a algunos asistentes a preguntarse qué hacía ella allí.

Aquello pasó casi desapercibido porque alguien en la organización se encargó de reservarle espacio en la foto nombrándola portavoz del jurado.

Lógicamente, tanto la asistencia a ese como a los demás actos le sirven para darse a conocer políticamente, lo cual puede servirle a medio plazo, ya que será la candidata a la Alcaldía en 2019.

Junto a esa presencia en todo tipo de eventos se da la circunstancia de que "lleva semanas presentándose como representante absoluta de la oposición meca y acudiendo a todos los eventos en los que pueda estar presente un medio de comunicación", dice el PSOE.

La gota que colmó el vaso llegó con la Gala do Deporte Meco celebrada el domingo por la noche, cuando la popular "pretendió ocupar el sitio del alcalde".

Así lo atestiguan los socialistas, quienes creen "preocupante" la "falta de formas y de respeto institucional" de Beatriz Castro, "quien está empleando interesadamente su cargo simultáneo en la Asociación de Hostelería para avanzar en su carrera política".

Lo que hizo esta vez fue sentarse "en una de las sillas reservadas a los concejales de la Corporación, concretamente la que era más visible desde el público, y cuando fue instada a levantarse para dejar sitio a los concejales se negó en reiteradas ocasiones, hasta que fue el propio alcalde quien tuvo que solicitárselo".

Pero la historia no termina aquí, ya que, según los socialistas, Beatriz Castro ocupó finalmente un lugar en el espacio reservado a los premiados de la gala, y una vez finalizada ésta "increpó al alcalde y otros miembros de la Corporación empleando recursos propios de la derecha más rancia y dictatorial".

Y es que se habría dirigido a ellos empleando términos como "que vos creedes", "non tendes nin idea" o "non sabedes quen son eu".

E incluso más. Beatriz Castro habría insistido en su currículum de "gran especialista en protocolo" y habría "despreciado los conocimientos de los miembros del gobierno".

Cuando estos le pidieron "que se tranquilizara y evitara el escándalo", la reacción de la presidenta del PP "fue agresiva, diciendo que tenían que pedirle disculpas".

¿Pero por qué tanto lío en la Gala do Deporte Meco? Pues porque la líder de los populares "no contaba con invitación institucional para este acto, a pesar de lo cual, según sus conocimientos de protocolo, consideraba que tenía que estar entre los concejales".

Es por ello que los socialistas le recuerdan que "no es un cargo electo" y le dicen que "este comportamiento deja clara la política del PP, donde lo único que preocupa es el sillón, en lugar de los problemas reales de los vecinos".

Muy molestos por lo sucedido, en el PSOE de José Cacabelos instan al PP "a dejar a un lado los intereses personales" para empezar a trabajar por los vecinos.

Del mismo modo que inciden en que la candidata del PP -que no es cargo electo y no ganó ningunas elecciones- "está ejerciendo dos cargos para sus propios intereses". Tanto es así que llegan a decir que "el hecho de reivindicarse como experta en protocolo guarda relación directa con la intención de colocar a su empresa de organización de eventos en las entidades públicas".

A este respecto incluso el anterior gobierno del PP "tuvo un enfrentamiento con Beatriz Castro al negarse a contratar a su empresa para gestionar las partidas de gastos protocolarios de la Alcaldía".

En el PSOE terminan pidiendo "respeto institucional" entre los grupos de la Corporación y advirtiendo de que "el enfrentamiento político debe mantenerse dentro de las reglas del juego y teniendo como prioridad absoluta la atención a los vecinos".

En relación con esto destacan que "el actual mandato se está caracterizando por la corrección", pero temen que la nueva directiva del PP pueda recuperar "una vieja política de enfrentamientos y crispación que solo resulta perjudicial para el pueblo".