-La Protectora de Cambados forma parte de una plataforma de entidades a nivel gallego que se opone a la ley de Protección e Benestar Animal que está elaborando la Xunta de Galicia. ¿Por qué?

-Porque esa ley nos devuelve al siglo XX, y estamos en el XXI. Esa ley prohibe dar de comer a los perros en la calle. Y yo me pregunto, ¿saben los redactores de la ley en cuantos municipios funciona al 100 por 100 el servicio de recogida? La ley también prohibe entrar en una cafetería con una mascota, y eso tendrá que decidirlo el propietario del establecimiento. Hay aspectos muy buenos en la ley, pero también hay otros que es necesario cambiar.

-¿Hubo diálogo con las protectoras?

-No, nosotros, como Protectora de Cambados presentamos alegaciones al proyecto y ni siquiera nos contestaron. A menos de 10 días de que entre la ley en el Parlamento no hay ni un solo partido político que llamase a las protectoras para preguntarnos nuestra opinión. A mí sí me llamó una persona, pero lo hizo a título particular. El problema de los políticos es que hacen las leyes sin salir de los despachos.

-Tienen dos frentes abiertos, con la Diputación y la Xunta. No es fácil salir airoso de dos batallas simultáneas.

-Los plazos vinieron así. Las protectoras llevamos 3 meses reuniéndonos y consensuando opiniones. Por una parte, lo que sucede en la CAAN nos afecta al 100% a las protectoras, mientras que la ley autonómica le afecta a toda Galicia. Es cierto que vino todo muy junto, perohay que dar voz a los animales.

-¿Es viable el sistema centralizado de la CAAN?

-No, es inviable. Si en Cambados recogemos unos 20 perros al mes, ¿cuántos tendrían que recoger ellos en 49 municipios?