Hace seis años, un grupo de vecinos de San Miguel de Deiro, en Vilanova de Arousa, decidió hacerse cargo de la comisión de fiestas ante la posibilidad de que la parroquia se quedase sin uno de sus grandes eventos. Aquella decisión se encontró con el respaldo de toda la parroquia, e incluso, con el apoyo de diferentes casas comerciales, convirtiéndose en el germen de una de las fiestas más espectaculares de la comarca. Así lo demuestran tanto el cartel de este año, como los espectaculares arcos luminosos que instalan cada año en la PO-549 para celebrar el evento y que convierten a San Miguel de Deiro en una pequeña feria de abril, aunque en el mes de mayo.
Este año será el último de la comisión, explica José Antonio, uno de los grandes impulsores del evento, y no se va a escatimar en esfuerzos, ya que la previsión "es instalar 45 arcos luminosos por toda la PO-549 para atraer a la gente a las fiestas, será diferente al del pasado año, con más arcos, pero igual de atractivo y con la misma intensidad lumínica". Todo ese espectáculo lumínico comenzará a instalarse el próximo martes, y se espera que el viernes se encuentre ya funcionando y provocando la admiración de todo aquel que circule por la zona en horario nocturno. "Cada año nos hemos ido superando en la iluminación y ya se ha convertido en un clásico, con gente haciéndose fotos de recuerdo", señala José Antonio. Además, también es un auténtico reclamo para las fiestas, algo que han notado en todos estos años por el notable incremento en la afluencia de los espectadores.
El otro reclamo son las orquestas, ya que en San Miguel de Deiro estarán tres de las mejores y más reconocidas de Galicia. Así, el sábado 6 de mayo, la tradicional verbena de San Miguel contará con la presencia de Gran Parada y de Panorama, orquesta que ha estado presente siempre durante esta época, salvo el pasado año, al coincidir con una gala en León. El domingo será el turno de Pontevedra y París de Noia, mientras que para el lunes 8 de mayo, se subirán al escenario Marbella y el Combo Dominicano.
Reunir todo este cartel no es tarea sencilla, por los numerosos compromisos que tienen las orquestas, pero el hecho de que el evento se celebre en el mes de mayo, cuando todavía no se ha iniciado la campaña de fiestas, beneficia a la comisión de fiestas, tanto en el coste como a la hora de poder contar con ellas.
Afrontar el coste que suponen estas fiestas no es una tarea fácil, sino que obliga a la comisión a trabajar a destajo prácticamente desde el día siguiente a que finalicen las fiestas. "La verdad es que nos hemos encontrado con un respaldo total de los vecinos de la parroquia y de algunos lugares próximos, pero claro, no nos queda otra que patear mucho a los 18 integrantes de la comisión", explica José Antonio.
Tras todo este espectáculo, insiste, se encuentra "un duro trabajo, en el que el apoyo de los vecinos nos ha dado impulso para convertir las fiestas de San Miguel de Deiro en la referencia que son hoy en día.
