El perfecto maridaje entre chocolate y juguetes es casi tan efectivo en cuanto a su atractivo entre los más pequeños como una buena sesión de dibujos animados. La juguetería Tiko Doco de Vilagarcía ha querido poner el dulce como reclamo para sus clientes en estas fechas de Pascua y ha decidido mantener una apuesta que funcionó muy bien el año pasado.
En su establecimiento de Vilagarcía luce en el escaparate desde hace unos días un huevo gigante de chocolate que llama la atención de cualquiera que pasa por allí. Nos referimos a un envoltorio que supera el metro y medio de altura y que a nadie deja indiferente a su paso.
Los aficionados al sucedáneo del cacao tienen una parada obligatoria estos días en Tiko Doco. Ocho kilos de chocolate le pueden tocar en suerte de ser uno de los clientes que ha decidido comprar algún artículo en la tienda situada en la Avenida Rodrigo de Mendoza a lo largo de los últimos días. Los que todavía no han tenido tiempo para ello aun podrán hacerlo antes del próximo sábado día 15 de abril. Esta es la fecha elegida para proceder al sorteo que tendrá lugar a las cinco de la tarde.
Alfredo González, gerente de la cadena de jugueterías, apuntó respecto a la idea del huevo gigante de chocolate que "el año pasado funcionó muy bien en cada una de las tiendas que tenemos por toda Galicia. Es mucha la gente que nos ha preguntado que poder hacer para participar y con una única compra ya entran en el sorteo. Son muchos los que se sorprender porque tampoco exigimos un gasto mínimo para poder entrar en el sorteo".
Por si fuera poco, ni siquiera es necesario estar presente en el sorteo del sábado para poder ser el agraciado. "Nosotros nos encargaremos de avisar al ganador del sorteo de su elección para que venga a retirarlo por la tienda", apunta el gerente de Tiko Doco.
Este año el sorteo se realizará únicamente en la tienda de Vilagarcía, cuestión que incluso ha animado a clientes de otros lugares a acercarse por la localidad a realizar sus regalos de Pascua y, de paso, poder optar a llevarse el huevo a su casa.
Las temperaturas de estos días han obligado incluso a tomar medidas especiales para que el chocolate no se derrita. Además del aire acondicionado del establecimiento, los ocho kilos de chocolate están convenientemente protegidos del sol para que se conserve en perfectas condiciones para entregar a su futuro vencedor. En este sentido, Alfredo González aún recuerda la experiencia vivida el año pasado en una de sus tiendas, "hubo un huevo que se nos derritió y tuvimos que comprar otro exactamente igual". Lo que también quedó claro es que ninguno de los afortunados se dejó ni una miga de tan rico chocolate.
