Más de medio centenar de delegados de los sindicatos CC.OO, UGT y CIG se concentraron a mediodía de ayer ante las puertas de la residencia de ancianos Divina Pastora de Vilagarcía para exigir a la patronal del sector la reanudación de las negociaciones del convenio colectivo. La protesta se escenificó ante este centro vilagarciano debido a que las delegadas de la plantilla llevan más de un año luchando para que la dirección y el patronato cumplan lo establecido en los acuerdos laborales que están en vigor.

Los manifestantes se reunieron ante las puertas del asilo de Vilagarcía sobre las 12 horas y minutos después protagonizaron un corte de tráfico en la calle Ramón López Piñeiro para amplificar el acto de protesta, seguidos atentamente por efectivos de las policías Nacional y Local en la ciudad.

La concentración celebrada ayer es la tercera que organizan los delegados gallegos de los tres sindicatos (las dos anteriores fueron en Vigo y en Santiago) para exigir a la patronal que vuelva a sentarse a negociar el nuevo convenio del sector de las residencias privadas de la tercera edad.

El sindicalista de Comisiones, Ángel Cameselle, recordó que las negociaciones quedaron rotas al negarse la patronal a aceptar asumir el incremento salarial. Las movilizaciones continuarán la próxima semana y no se descarta la convocatoria de una huelga.

Cameselle explicó que la oferta de la parte empresarial era un incremento de 0% en 2016, el 0,5% en 2017 y el 1% para 2018. Los sindicatos consideran esto inasumible porque ya en el convenio del sector se establece que si no hay acuerdo sobre aumento salarial se debe aplicar el IPC, y este índice subió el año pasado un 1,6%. Los sindicalistas exponen que las previsiones de inflación son aún mayores para el actual ejercicio económico.

"Criticamos que la oferta patronal no esté acompañada de ningún tipo de mejora: ni reducción de jornada, ni incrementos de cuadro de personal, factores que podrían, cuando menos ayudar a la conciliación de la vida personal, familiar y laboral, además de mejorar la calidad asistencial", indicó.

La situación del asilo

La situación es aún peor cuando el objetivo se fija en la residencia de mayores "Divina Pastora" de Vilagarcía donde las delegadas sindicales aún discuten con la dirección del centro el cumplimiento del convenio colectivo en vigor. Ángel Cameselle también expuso que este centro de atención a las personas de la tercera edad tiene un alto índice de temporalidad en la contratación, ya que son pocos los trabajadores fijos.