El Concello de Vilanova se ha puesto como objetivo primordial recuperar una parte muy importante de su pasado, para lo cual, ha comenzado a buscar la financiación necesaria para excavar en Cálago y sacar a la luz los restos del antiguo castro, el monasterio y la iglesia. El grupo de gobierno analiza tres posibilidades diferentes, que pasarían por recurrir al departamento de arqueología de la Diputación de Pontevedra, que cuenta con experiencia en este tipo de trabajos después de los que ha realizado en A Lanzada, Besomaño y Castro Alobre. Otra de las opciones es solicitar a la Xunta que actúe sobre el yacimiento, mientras que la tercera de las opciones sería acometerlo el propio Concello.
Lo que tiene muy claro el alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, es que, una vez firmado el convenio con los propietarios "vamos a acometer los trabajos para sacar a la luz una parte muy importante de nuestro pueblo, ya que fue en Cálago donde nació este pueblo".
Una de las cuestiones para la que va a servir la excavación será la de determinar donde se encontraba el antiguo monasterio. Las referencias que se tienen, gracias a los documentos que se conservan en San Martiño Pinario, es que el convento se fundó en torno al siglo VII por San Fructuoso y que se encontraba en las inmediaciones de la antigua citania castrexa, cuya croa es perfectamente localizable en la actualidad. El monasterio sufrió las incursiones normandas y árabes y acabó desapareciendo. Se sospecha que podría encontrarse en las inmediaciones del actual cementerio, ya que en esa zona se encontraron varias tégulas romanas.
Durán no dudaba en asegurar que los trabajos en Cálago van a "marcar un hito en la historia de Vilanova de Arousa y de la comarca, ya que pueden arrojar datos muy importantes, al ser un terreno en el que apenas han actuado los arqueólogos; Cálago será una página nueva en nuestra historia".