Los vecinos de Armenteira acaban de constituirse en asociación con la idea de promover este histórico y paisajístico entorno en el que proyectan inversiones privadas pero a la vez buscan el respaldo de las administraciones, en especial el Ayuntamiento de Meis.
La próxima apertura de una casa de turismo rural, la idea de un restaurante y un centro de rutas caballares son las primeras ideas que tienen en mente algunos particulares que han apostado por revitalizar la parroquia meisina.
Pero para que ello sea viable han de contar con el compromiso de las instituciones para corregir carencias endémicas relacionadas con servicios tan básicos como el tendido eléctrico o el deficiente alcantarillado.
Con los temporales de principios de febrero fueron evidentes estas deficiencias pues varios lugares como Cabeza de Boi, Balboa, Busto o Armenteira quedaron sin luz eléctrica durante casi tres días, al parecer por un fallo en el transformador de Poio del que depende la fase que les suministra.
Recuperado el servicio, el estado del tendido continúa siendo deplorable y mucho peor la iluminación pública, casi inexistente en zonas por las contínuas averías.
A este problema hay que sumar la inexistencia de alcantarillado en la práctica totalidad de estos núcleos y los vecinos tienen que conformarse con los tradicionales pozos negros y alguna fosa séptica de mayor tamaño o de más fácil vaciado.
Tampoco están de acuerdo con ser los grandes olvidados "en invierno" cuando las carreteras se llenan de maleza o de ramas que caen a consecuencia de los temporales, por lo que la imagen de este paradisíaco lugar pierde enteros.
La nueva asociación sabe que las potencialidades del lugar son numerosas por la cercanía de espacios tan importantes como el propio monasterio cisterciense, conocido como la catedral de O Salnés.
Es sin duda la principal joya arquitectónica que se encuentra en uno de los extremos de una de las rutas de senderismo más singulares de la provincia pues discurre a orillas fluviales, en plena comunión con la naturaleza.
Por si fuera poco, a escasa distancia se encuentra el campo de golf de Meis, una extensión enorme en la que los aficionados cuentan con 18 hoyos para hacer filigranas con los palos y el caddie.
Unos pasos más allá, aunque ya en el municipio de Poio, se encuentra el principal bosque de sequoyas de Galicia, sin duda un espectacular paraje para disfrutar de la naturaleza que ofrece el monte de A Escusa donde todavía se pueden ver muchos caballos mostrencos trotando a su albedrío.
Por si fuera poco, cuentan con una pousada rural de cuatro estrellas que más tarde o más temprano deberá abrir para captar un turismo de buen nivel adquisitivo pero también a grupos que precisen contar con una veintena de habitaciones de lujo accesibles.
Y desde allí otros innumerables reclamos turísticos como las iglesias románicas de San Martiño o San Salvador de Meis, los molinos típicos de ríos que caen en cascada, lavaderos, fuentes y cruceiros.
Pero a la vez disponen de infraestructuras inmejorables de comunicaciones. Armenteira se encuentra a menos de cinco minutos de la autovía de O Salnés por lo que viajar en dirección a las playas de Sanxenxo y O Grove puede convertirse en una oferta alternativa a los visitantes.
Los responsables de la asociación reconocen que aunque cuentan con una amplia oferta, la promoción de esta zona todavía requiere de un gran empuje.
"Habrá que ir paso a paso porque este tipo de proyectos son lentos" afirma uno de los portavoces del colectivo que expone que la asociación va a tener ese papel de acudir a las administraciones para que apuesten por mejorar Armenteira.
La primera "zancada" estará dirigida a recuperar la Casa da Cultura para poder ofrecer actividades a los vecinos y también a los futuros visitantes si se tercia.
La iniciativa tiene que ver con la reciente apertura del albergue de peregrinos, no en vano se trata de uno de los lugares clave de la llamada Ruta Espiritual a Compostela, que tanto auge ha cogido en los dos o tres últimos años.
Pero a su vez quieren que el Ayuntamiento o la Diputación se acuerden de mejorar el campo de fútbol de la localidad, pues es uno de los pocos en los que no se han realizado inversiones últimamente. Subrayan que Armenteira es una de las pocas localidades gallegas que cuentan con un equipo cadete femenino y que "no pueden estar jugando en un lodazal" como vienen haciendo.
