La Policía Nacional de Vilagarcía detuvo ayer, una vez más, a J.L.P.L., un vecino de Cornazo, de 40 años, apodado "Cadillo", que entra y sale de los calabozos con frecuencia, casi siempre por lo mismo. Esta vez fue sorprendido "con las manos en la masa" mientras, presuntamente, intentaba robar un céntrico bar.

Los hechos ocurrieron a las cuatro de la madrugada en el bar "O Paseo", en la calle Rodrigo de Mendoza. Su propietario, Álvaro Vázquez Villanueva, reclama "que lo encierren de una vez y no lo dejen salir con tanta facilidad" y explica que el individuo en cuestión rompió la cristalera para intentar robar, pero sonó la alarma y como la Policía Nacional estaba cerca, de patrulla, lo localizó inmediatamente dentro de mi negocio y lo detuvo".

"No se llevó nada porque los policías estaban cerca, pero es vergonzoso que esta persona se ría de todo el mundo simplemente porque los jueces lo dejan salir a la calle en cuanto declara, y para eso no sirve de nada el trabajo policial", relata el dueño del bar, donde ya robaron hace poco más de un año, en aquella ocasión incluso prendiendo fuego en el interior.

En el año 2016 "Cadillo" fue detenido una docena de veces como presunto autor de distintos robos. A principios del presente ejercicio fue apresado de nuevo por la Policía Nacional tras, presuntamente, haber perpetrado un robo con fuerza en el bar Xocas.