-Sin el Alfredo Bea político queda el Alfredo Bea presidente de la Federación Gallega de Piragüismo...

-Pues claro. Seguiré adelante con mi vida particular y privada, pero también haciendo lo que me gusta. Pero lo de la política no está del todo claro, ya que no descarto presentarme a las europeas o a las autonómicas. Si querían apartarme de la política porque molesto quizás siga molestando mientras pueda, y si no sirvo para concejal puede que sirva para presidente de la Xunta o del Gobierno de España. Afortunadamente hay muchos trabajadores del Concello que me dicen que fue un honor para ellos trabajar conmigo y que reconocen la injusticia que se está cometiendo, y eso significa que tan malo no pude ser.

-¿Y qué se lleva de esta etapa?

-Satisfacción, orgullo y agradecimiento.

-¿Con qué acciones o proyectos se queda de su etapa con responsabilidades de gobierno en O Grove?

-Cuando entré a formar parte de la Corporación O Grove era de una manera, y cuando me fui había mejorado enormemente. No teníamos un servicio de recogida de basuras moderno y funcional, que además conseguimos con coste cero para los vecinos; dejamos una plantilla de barrenderos, que antes no existía; logramos una base y un servicio de Emergencias y Protección Civil modélicos; hicimos que los vecinos pudieran disfrutar de campos de fútbol dignos en As Lampáns y Monte da Vila; hicimos realidad el nuevo pabellón polideportivo, que era la gran lucha de los grovenses... Todo esto, guste o no, fueron acciones impulsadas por las concejalías que gestionábamos desde el Partido Galeguista. Incluso modernizamos la Policía Local, para lo cual tuvimos que tomar algunas decisiones que no gustaron a los agentes, por eso algunos se pusieron de uñas contra mi.