Su presencia por la Variante Espiritual el pasado martes no había pasado desapercibida, pero ayer, en Vilanova, el desfile protagonizado por más de medio centenar de cosacos del Volga dejó boquiabiertos a todos los vilanoveses que se cruzaron con ellos. Poco después de las 10.00 horas, el grupo de cosacos, encabezado por Alexander Vasilenko salió del albergue del pabellón de Vilanova, donde habían pasado la noche, hacia la recepción que el Concello les tenía preparada en el salón de plenos.

Siempre ante ellos, viajaba un icono de la Madre de Dios "Libertador de los Problemas", escoltada por dos religiosos ortodoxos. El icono presidió el acto institucional en el salón de plenos del Concello, donde el alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, agradeció a los cosacos del Volga haber elegido Vilanova como punto de parada en su peregrinaje a Compostela.

Con uno de los religiosos ortodoxos ejerciendo de traductor, los representantes rusos, entre los que se encontraba un agregado cultural de la embajada en Madrid, destacaron la "cálida" acogida que se les tributó en Vilanova, además de destacar la belleza de la Variante Espiritual, por la que transitaron el pasado martes desde Armenteira. Todos ellos hicieron hincapié en el contenido espiritual del viaje y en su intención de conocer las reliquias religiosas que se esconden en España, entre ellas, los restos del apóstol Santiago. La expedición cosaca y el Concello intercambiaron regalos y se comprometieron a repetir el encuentro, con una invitación lanzada al regidor vilanovés para que acuda a conocer Rusia en los próximos meses.

Tras una foto de familia multitudinaria, la expedición de cosacos emprendió el camino hacia el muelle de Vilanova, donde les aguardaba un catamarán para comenzar la ruta por la ría de Arousa y descubrir el Camiño de Santiago original, el mismo por el que pasaron los restos del apóstol camino a Santiago.

Tras comer en Padrón, la comitiva emprendió camino hacia la capital compostelana, donde hoy estaba previsto celebrar dos misas ortodoxas, con botafumeiro incluido, en la propia catedral de Santiago.

La llegada de los cosacos del Volga fue gestionada desde la Mancomunidade de Municipios de O Salnés, gracias a la colaboración que, desde hace dos años, mantienen con Luks Marbella, un colectivo que reúne a todos los ciudadanos del país eslavo que residen en el Levante y sur de España.