El Concello de Cambados, a cargo de la concejalía de Servicios, Obras y Urbanismo encabezada por José Ramón Abal, se ha beneficiado de las bondades de un sistema de gestión de consumos energéticos que en su primer año de actuación que ha generado un ahorro de casi 80.000 euros a las arcas municipales. Se trata además de una línea de actuación que se enmarca en un plan que finalizará en 2019 con una previsión de ahorro respecto a la partida de 2015 que rondará los 130.000 euros.

El edil cambadés apuntó en su exposición que "se decidió acometer un proyecto de implantación de la gestión energética con la contratación de un asesor energético que se encargó de supervisar los casi 150 contratos de suministro eléctrico que se traducen en más de 2.000 facturas al año". Esta contratación se enmarcó dentro de un equipo de trabajo en el que también se incluía al técnico municipal responsable del área, la empresa de mantenimiento y el propio asesor bajo la dirección de la concejalía.

El primer paso a dar fue un inventario de todas las instalaciones municipales que consumían energía. Sobre esa base se creó una herramienta informática para realizar un seguimiento actualizado de las necesidades y consumos. "De ese modo se pudieron tomar mejores decisiones en cuanto a optimización de tarifas y contratos". Incluso, apuntó Abal, que "el control exhaustivo de las facturas ayudó a detectar fallos, cuya reclamación consiguió abonos a favor del concello de Cambados por un total de 26.603,35 euros".

Entre las acciones correctoras implantadas se han ajustado las tarifas a los consumos reales, se realizó una corrección de las ineficiencias de la gestión y uso en las instalaciones, inversión en la mejora de problemas técnicos para un mayor ahorro, así como una racionalización y priorización de las inversiones.

Este tipo de medidas ha servido para que el gasto de las arcas municipales, que en diciembre de 2015 fue de 483.091 euros, se redujese hasta los 404.111 euros en diciembre de 2016, lo que supone un ahorro del 16,35%.

Buena parte del ahorro ha venido precedido de una inversión como los 32.000 euros empleados en la sustitución del alumbrado de la avenida de Castrelo y que permitirá un ahorro anual de 11.120 euros, así como los 70.000 empleados en la misma cuestión en la avenida de Vilagarcía y avenida de Vilariño y que ha supuesto un recorte en gasto de cerca de 15.000 euros.

Con todos estos cambios, la previsión de José Ramón Abal es que en 2019 el gasto anual municipal en facturas de energía eléctrica haya descendido en cerca de 130.000 euros respecto a 2015.