El aplazamiento del pleno ordinario de Vilagarcía del 23 de febrero al 2 de marzo para incluir el debate del Presupuesto no ha sido visto con buenos ojos en las filas de la oposición. El grupo mayoritario, el PP, se pregunta "qué patraña es esa de aplazar el pleno para que tengamos más tiempo si nos siguen ocultando la información clave". "Es una vergüenza", afirma el portavoz popular, Tomás Fole. "Hay que ser muy lumbrera para sorprenderse de que febrero tenga 28 días", agrega.
Para el concejal conservador los argumentos esgrimidos por el ejecutivo socialista para posponer una semana la sesión plenaria "huelen a chamusquina". "Además del supuesto beneficio que obtendrá la oposición, que la oposición no cree, suena a que probablemente la razón real atienda a las matemáticas: o Alves empieza a entender la gravedad de su situación de transfuguismo si vota a favor o se abstiene en los Presupuestos, o es que a alguien de los que tienen que votar quizás no le iba bien la fecha prevista, al tiempo que una baja por incompatibilidad de un voto en contra aliviaría la presión y el voto de calidad".
Para Fole "es el colmo" que a través de los medios el gobierno anuncie una reunión con la oposición el próximo 22 de febrero para entregarle el Presupuesto "y no avise a la oposición".
En los mismos términos se pronuncia el portavoz de Somos Maioría, Gaspar Somoza, que critica que los socialistas hayan puesto fecha a ese encuentro sin consultarlo a los demás grupos. Además, "si la documentación completa nos la van a dar el día 22 vamos a ganar la friolera de 24 horas para estudiarla", censura. "Es lamentable y esperpéntico que, aun al amparo de una norma, el gobierno varíe la fecha del pleno sin consultarlo con la oposición. El año pasado, cuando falleció un funcionario, la fecha del pleno se acordó entre los grupos. Ahora nos dan la fecha ya por mail", concluye Somoza.
