El Servizo de Conservación da Natureza, dependiente de la Consellería de Medio Ambiente, ha remitido al Concello un informe favorable sobre el proyecto de un paso inferior peatonal y ciclista en la PO 308, a la altura de A Lanzada, como solución a la falta de seguridad en la zona. Ese lugar se utiliza muya menudo, especialmente en verano para acudir andando desde la zona de A Revolta a la playa, pero hace unos años se suprimió el paso de cebra, lo que genera gran peligro a los usuarios.

El proyecto había sido presentado en diciembre de 2015 por el alcalde de Sanxenxo, Gonzalo Pita, y el concejal de Infraestructuras, Daniel Fernández a la conselleira de Medio Ambiente, Ethel Vázquez, en una reunión mantenida en las dependencias de la Xunta en Pontevedra. Daniel Fernández aprovechó la presencia en Sanxenxo la pasada semana de Ethel Vázquez, que acudió a supervisar el avance de las obras del proyecto de seguridad vial de la PO 308, para adelantarle que el Concello solicitará una reunión con su departamento para abordar la financiación de esta obra, con un coste ligeramente superior a los 200.000 euros.

La propuesta técnica que cuenta con el beneplácito de Conservación da Natureza conectaría el vial que proviene del núcleo de A Revolta con el paseo de madera que discurre paralelo a la playa de A Lanzada, garantizando un paso peatonal seguro por debajo de la carretera, situado a la altura del paso de peatones que en su día fue eliminado por no reunir el vial las condiciones exigidas. El paso estanco incluye rampas laterales para cumplir los requisitos de accesibilidad.

El gobierno local mantuvo ya varias reuniones, primero con la jefa provincial de Costas y posteriormente con el responsable provincial de Carreteras buscando solución a un problema que preocupa tanto a los vecinos del entorno como a los propietarios de establecimientos hoteleros, que alertan sobre las posibles consecuencias que puede tener para los usuarios del arenal el hecho de tener que cruzar la carretera sin ninguna medida de seguridad.

En este tramo fue descartada también la opción de un paso elevado, por encontrarse enclavado en una zona de especial protección de Red Natura. El impacto visual y ambiental que esta solución técnica tendría sobre el entorno, junto al escaso uso que este tipo de pasos tiene por parte de los peatones fueron las razones para descartarlo.

El proyecto agradó a la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, que lo consideró una solución técnica viable e idónea para una zona que está fuera de los espacios grafiados por Augas de Galicia como "inundables". El gobierno local solicitó a Ethel Vázquez ya en 2015 que sea el departamento autonómico quien asuma el coste de ejecución de esta obra, por lo que ahora solicitará una reunión para abordar con detalle esta cuestión.