Las sospechas que el portavoz del PP hizo caer hace unos días de una posible negociación del gobierno municipal socialista con el concejal Miguel Alves, que representa a los críticos de la agrupación de Esquerda Unida apartados por la dirección de su partido de los asuntos municipales, ya tiene respuesta. Un miembro del sector crítico de EU destapa la reunión celebrada en una cafetería por los miembros de la oposición Jesús López (EU), Tomás Fole (PP) y Gaspar González Somoza (SM) poco antes de que se desatara su ofensiva por el tema de los Presupuestos 2017.
La situación de la agrupación local de Esquerda Unida aún no se ha aclarado. La dirección del partido acordó la creación de una gestora cuyos integrantes aún no ha dado a conocer y cambió la cerradura de la sede, por lo que la docena de integrantes de militantes vilagarcianos que se reunían todos los miércoles para abordar asuntos municipales con el concejal Miguel Alves ahora tienen que hacer uso de otros locales para este fin.
El grupo municipal de EU ha quedado dividido: por una parte el cabeza de lista y portavoz municipal Jesús López y la concejala María Mosquera, que no reconocen las reuniones asamblearias para decidir los asuntos de los plenos, y por el otro el concejal Miguel Alves que mantiene el sistema utilizado desde hace años por esta agrupación local y da importancia a las asambleas.
La situación llegó hasta tal punto que cambiaron las claves del ordenador, dejando a Alves sin acceso a la información que remite el gobierno municipal socialista a los concejales. Finalmente pudo solicitar unas claves nuevas y ahora se mantiene al día con todos los temas del pleno.
Alves continúa celebrando las reuniones de los miércoles con la docena de compañeros de EU que siguen apostando por las asambleas para abordar los asuntos municipales. De hecho, han estado estudiando la documentación remitida por el gobierno local sobre los Presupuestos y preparan sus propias aportaciones, aunque confiesan que no las han remitido y que tampoco han negociado nada con el alcalde.
Por su parte, Alves volverá a reunirse el miércoles con estos militantes para tratar los asuntos que se llevan al pleno ordinario de este mes. Para ello, como todas las semanas, volverá a solicitar por escrito la apertura de la sede, aún presuponiendo que, como en anteriores ocasiones, no recibirá ninguna respuesta.
Esta sesión plenaria abordará asuntos de trámite y varias mociones, ya que el documento presupuestario para el actual ejercicio económico aún no está cerrado. El gobierno municipal anunció recientemente su intención de retomar las reuniones con los portavoces de la oposición a partir de la semana entrante.
Retomar los contactos
La idea del alcalde era retomar los contactos primero con cada uno de los representantes de los grupos políticos por separado y después una junta de portavoces.
De momento solo cuenta con aportaciones específicas del grupo municipal del BNG y también de Esquerda Unida que, según el alcalde, están siendo estudiadas para su posible incorporación en el borrador del documento que está en fase de redacción.
