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El Parlamento asume la necesidad de regularizar la potencia de la flota de bajura

El Bloque Nacionalista Galego presentó la propuesta para evitar que las embarcaciones acaben siendo sancionadas

Embarcaciones de marisqueo a flote en la ría de Arousa. // Noé Parga

El Bloque Nacionalista Galego logró el apoyo de todos los grupos representados en la Comisión de Pesca del Parlamento gallego para regularizar la potencia de la flota artesanal y de bajura, con el fin de evitar que terminen siendo pasto de sanciones o ser despedazada en base a la actual normativa europea. En concreto, estarían afectados por la problemática del caballaje de los motores sobre medio millar de embarcaciones.

La propuesta aprobada por unanimidad por la cámara insta al gobierno de la Xunta a realizar, de forma inmediata, todas las actuaciones precisas que permitan regularizar el caballaje de las embarcaciones pendientes que quedaron fuera del procedimiento impulsado por la Lei 9/2007 y que se exponen a ser duramente sancionados en su actividad.

Con esta medida, que defendió la portavoz de Pesca nacionalista, Montserrat Prado, el BNG pretende que las embarcaciones afectadas dispongan de mayor seguridad para sus tripulantes, "porque no es lo mismo tener que afrontar una situación de peligro en el mar con una potencia del motor que con otra muy inferior" y, por otro lado, "alejar la posibilidad de que esta flota siga a ser pasto del desguace".

Regularizar la potencia de estas embarcaciones acabaría también con la "especulación", ya que la única manera de obtener más caballos para el motor de una embarcación es, en la práctica, la compra-venta de la potencia que dejan los barcos que desaparecen.

Prado presentó esta propuesta en la Comisión de Pesca a raíz de lo que considera una actuación "desproporcionada" de la Guardia Civil en el puerto de Aguiño, con el decomiso de tres embarcaciones dedicadas a la captura del percebe. Esa actuación se debió, precisamente, a la utilización de motores con una potencia superior a la declarada en la documentación de estas embarcaciones, lo que acabó generando "una gran alarma social y que dejó sin su medio de vida a los titulares de las mismas".

La diputada nacionalista negó que se tratase de una situación de furtivismo, si no de un acceso más seguro al recurso "mejorando las medidas de auxilio y salvamento de la propia tripulación y, además, es una medida que no tiene incidencia alguna en el esfuerzo pesquero, dado que el mismo está regulado mediante una serie de cuotas diarias dependiendo de la especie a capturar", concluyó Prado en su intervención.

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