El PP echa el freno. Pese a que su concejala Ana Granja fue la que preguntó en el Ayuntamiento por la situación urbanística del macrobazar chino abierto en una de las naves del acceso al Hospital do Salnés, ayer la formación conservadora emitió un comunicado para aclarar que la edil liberada "no ha interpuesto ninguna denuncia" ni contra los propietarios ni contra los comerciantes del citado negocio. Lo que ha hecho -explican- es "preguntar en el marco de la Xerencia de Urbanismo por una clara evidencia (que está funcionando un gran bazar) y fue el propio personal del Concello el que confirmó la situación urbanística irregular". "La concejala sí hace su trabajo. Todo lo demás es propaganda del gobierno y una clara intención de desviar la atención", recalcan desde el partido de Tomás Fole.
En opinión de la bancada conservadora, el "problema" con este establecimiento comercial es que "el PSOE paraliza las licencias por dejadez", haciendo "peligrar la creación de puestos de trabajo y la actividad empresarial y comercial". "El PP ha defendido siempre la implantación de iniciativas empresariales en la ciudad, hasta el punto de haberse quedado solo en la defensa de Megasa, frente al veto liderado por Varela y apoyado por gran parte de la corporación municipal. Intentar desviar la atención para querer focalizar las culpas en el PP de la inacción del gobierno es inaceptable y no lo vamos a consentir", sentencia el portavoz popular, Tomás Fole.
El concejal y exalcalde considera que Alberto Varela "no se entera de nada" cuando "toda Vilagarcía sabe que hay un nuevo chino en Rubiáns desde hace semanas". "Valiente defensa del pequeño comercio de un PSOE al que le abren una gran superficie comercial en sus narices y traga. ¿Sigue en vigor el veto?", se pregunta Fole. El edil de la oposición echa balones fuera al sostener que de la resolución que se dicte sobre el bazar será "el Concello el único responsable".
