La corporación municipal, por unanimidad, aprueba la moción socialista de apoyo a los pensionistas emigrantes retornados de Venezuela que desde el mes de enero han dejado de percibir sus pensiones. Por este motivo el pleno decide dirigirse a la Xunta de Galicia con el fin de que habilite una línea de ayudas para que puedan paliar la situación, y al Gobierno del Estado para que exija a Venezuela el cumplimiento del convenio bilateral sobre el pago de las pensiones.

En representación de los emigrantes retornados de este país americano intervino ante los concejales de la corporación municipal el vecino Emilio López Iglesias quien denunció el incumplimiento del convenio de pensiones por parte del Estado venezolano, al llevar los emigrantes retornados casi un año sin percibir las cantidades a las que tienen derecho por haberse jubilado en ese país.

López Iglesias recordó que en los años 50 y 60 marcharon a Venezuela de forma voluntaria muchos maestros a demanda de ese país que necesitaba plazas en el ámbito formativo y esas personas ahora, al regresar a Galicia no perciben sus pensiones. También hizo un llamamiento a la exigencia a Venezuela del cumplimiento en el convenio del pago de pensiones, indicando que éste se realice de acuerdo con el cambio oficial.

La portavoz del gobierno socialista y concejala de Benestar, Tania García, expuso que son muchos los emigrantes retornados de Venezuela que han acudido a los servicios sociales municipales por carecer de ingresos y encontrarse en una delicada situación. Por este motivo hizo hincapié en la necesidad de solicitar a la Xunta de Galicia que cree una línea de ayudas urgentes para poder cubrir las necesidades básicas de estos afectados.

Jesús López, concejal de Esquerda Unida, puso de manifiesto que recientemente el pleno abordó una moción de apoyo a marineros gallegos a los que Noruega les deniega la pensión y que tiene conocimiento de que otros emigrantes retornados de Argentina están teniendo problemas para percibir sus pensiones.

La socialista Tania García expuso que el problema del impago de las pensiones por parte de Venezuela afecta a 3.500 gallegos emigrantes retornados y muchos de ellos son vecinos de Vilagarcía de Arousa.