"Querémonos vivas". Esta frase que inundó la plaza de Ravella el 25 de noviembre con motivo del Día Mundial contra la Violencia de Género lamentablemente tuvo que repetirse ayer en la plaza de Galicia, con la voz más alta si cabe, tras los atroces asesinatos que en los últimos días se han cobrado la vida de varias mujeres, entre ellas una de Vigo y otra de Santiago.

La concentración de Vilagarcía se celebró de forma simultánea a las de otras ciudades y fue convocada de forma conjunta por el colectivo feminista O Soño de Lilith y por la asociación de ayuda a víctimas de violencia de género XTodas. El Concello aportó la pancarta del 25-N y asistió su máximo representante, el alcalde Alberto Varela, así como otros concejales de su gobierno como Tania García, Lino Mouriño o Sonia Outón. De la oposición no faltó ningún partido. Entre otros, estaban Elena Suárez (PP), Jesús López (EU), Xabier Ríos o Lucía César Veloso (ambos del BNG).

Una integrante de las asociaciones organizadoras procedió a la lectura de un manifiesto en el que dejó claro que las mujeres "no aparecen muertas, las matan". "Estamos desesperadas, hartas de ser agredidas y violadas. Y un día de estos nuestra rabia será imparable", advirtió.

Con el respaldo de decenas de personas que se dieron cita en la plaza de Galicia contra la lacra de la violencia machista, la portavoz instó a los allí presentes a "tomar las calles para parar el terrorismo machista". "Si tocan a una, respondemos todas", aseveró.

Entre los asistentes había hombres y mujeres de todas las edades. Algunos portaban carteles que rezaban que "el machismo mata" o "ni una menos".